Los okupas se ceban con un pueblo de Granada: Por 200 euros tiran la puerta y por otros 200 conectan la luz

La okupación no solo afecta a las grandes ciudades, los núcleos rurales también son víctimas de este fenómeno. Bien lo saben en Vélez de Benaudalla (Granada). Los okupas se han cebado con el centro del pueblo, un municipio de 3.000 habitantes.

El alcalde de la localidad, Francisco Gutiérrez, señala que los okupas rompen con la convivencia que tanto tiempo ha costado mantener y el problema es aún más grave en el casco antiguo con casas que son de herencias y sus propietarios no atienden. Están intentando contactar con todos los propietarios que tienen las casas vacías para que o bien pongan alarmas o les autoricen a tapiar todas las puertas y ventanas para que evitar nuevas okupaciones.

"Estamos intentando contactar con los propietarios de casa vacías para que tapien las puertas y así se eviten nuevas okupaciones"

Detrás de estos asentamientos ilegales se encuentra una mafia que por 200 euros abre la puerta y por otros 200 engancha el suministro eléctrico. Desde el Ayuntamiento quieren que el problema se contenga y no vaya a más. Esta situación se extiende a muchos municipios cercanos y están en conversaciones con la administración para poner fin a este problema que mina la convivencia entre los vecinos. "Las leyes las hacen los políticos y las cambian los políticos".

El alcalde es consciente de su capacidad limitada para hacer frente a los okupas. Son un municipio pequeño con una capacidad moderada de Policía Local aunque sí se apoyan en la Guardia Civil. "Hablamos mucho de la España vaciada y los pueblos pequeños no disponemos de una financiación digna para poder prestar este servicio", reclama.

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