Golpe en el epicentro del consumo y menudeo de droga en Toledo

Golpe en el germen de la delincuencia de Toledo. Unidades propias de la Comandancia de Toledo, en concreto agentes de seguridad ciudadana de la Cuarta Compañía de Illescas, con el apoyo del SECIR (servicio cinólogico y de remonta), con el perro detector de drogas y su guía canino, inspeccionaron en la madrugada del viernes varios locales de ocio en la zona de La Sagra para controlar el menudeo y consumo de drogas. "Se trata de un punto de delincuencia dado que es una demarcación limítrofe con el Sur de Madrid, con vías rápidas como la A-42, la A-5 y la A-4, unidas por la CM41- CM43, clima que propicia que bandas organizadas acudan a cometer hechos delictivos. Estos puntos se sitúan en poblaciones como Illescas, con gran población e cerca de vías rápidas. Aquí lo que interesa no es solo aprehender armas o efectos que se utilizan para delinquir, si no identificar a aquellas personas que puedan ser de interés policial para el dispositivo, a parte de prevenir consumo y sustancias", explica el Teniente Galindo.

La previsión de la noche era examinar cinco establecimientos elegidos aleatoriamente, haciendo una primera inspección administrativa con un especialista de la Ley 7/2011 de espectáculos públicos de Castilla La Mancha y a continuación un control de la Ley 4/2015 de seguridad ciudadana. Por ello, fijar a priori los cometidos y la función de cada agente para garantizar una eficacia máxima con gran resultado de cara al dispositivo resultó clave en este servicio. "En uno de los establecimientos detectamos a una persona que se intentaba meter en el baño para arrojar seis envoltorios de cocaína al inodoro. Lo hemos cacheado y además de la droga le hemos intervenido numeroso dinero en efectivo", indica el Teniente Galindo.

Puntos de verificación en carretera

Añade este Oficial, que en un control de personas y vehículos, dieron el alto a un varón con numerosos antecedentes -había cumplido siete años en prisión- . "Tras un primer cacheo se le intervinieron dos gramos de cocaína y tras un registro detallado en el interior de la furgoneta que conducía, el perro marcó otros dos lugares. Aquí hallamos dos básculas de precisión, para pesar la droga, que estaba escondida en la parte de atrás de la furgoneta", relata Galindo, que añade que además, encontraron un envoltorio y tras hacer una prueba con un spray detector de drogas, resultó positivo en cocaína. "Dicho individuo llevaba encima 1.200 euros en efectivo y no pudo justificar su procedencia", cuenta.

Tras un trabajo intenso -iniciado a las 22:00 horas del viernes y finalizado a las 6:00 de la mañana del sábado-, los agentes levantaron catorce actas por tenencia de sustancias estupefacientes, seis actas por tenencia de armas blancas a personas con numerosos antecedentes e investigaron a dos personas por tráfico de drogas. Un dispositivo establecido para prevenir el menudeo, consumo de sustancias estupefacientes y prevenir los delitos contra el Patrimonio.

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