El incendio que desde este pasado jueves está afectando a seis municipios de la provincia de Málaga ha revertido sobre las 12.45 horas al nivel 1, después de que se declarara el nivel 2 de emergencia, con objeto de que se incorporasen a las tareas de extinción como apoyo medios estatales. Además, la extinción evoluciona de forma "favorable", según han informado un portavoz de Infoca.
Por tanto, se retira la Unidad Militar de Emergencias (UME) y permanecerán trabajando en la zona efectivos del Infoca y Bomberos, según han apuntado las mismas fuentes.
La evolución del incendio, que afecta a Coín, Alhaurín el Grande, Mijas, Marbella, Ojén y Monda, con el resultado por el momento de un fallecido, varios heridos de distinta consideración y unas 5.000 personas desalojadas, es "favorable" y se espera que quede estabilizado en las próximas horas.
Por otra parte, los vecinos de Ojén, municipio que tuvo que ser desalojado, están volviendo a sus casas, después de que se abriera la carretera que permanecía cortada.
Actualmente, se encuentran trabajando en la extinción del fuego unas 300 personas, además de que hay otras 300 descansando que procederán al relevo. También hay en la zona ocho medios aéreos y, a lo largo del día, se van a ir escalonando otros efectivos.
Desde la Junta de Andalucía han advertido este sábado de que "tanto por la hora en la que se produjo el fuego, así como por los puntos" se pone de manifiesto que podría "haber sido un fuego provocado".
El fallecido es un alemán de 54 años
El hombre cuyo cuerpo fue hallado carbonizado bajo los escombros de una casa de aperos en Ojén este pasado viernes es un alemán de 54 años, según han confirmado desde la Subdelegación del Gobierno.
El cadáver de la víctima, C.R, que fue encontrado por la Policía Nacional en una casa que había sido desalojada, ha sido trasladado desde el Instituto de Medicinal Legal de Málaga a la sección de Criminalística del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de Madrid, han indicado fuentes de la investigación.
No obstante, el estado del cuerpo del fallecido, cuyas características serán corroboradas una vez que finalicen los últimos estudios, dificulta su identificación.
