La acusación de intento de violación a Dominique Strauss-Kahn representa un grave varapalo para las aspiraciones políticas del actual director gerente del FMI, quien, aunque aún no había anunciado su candidatura, se daba por descontado que estaba a punto de renunciar a su puesto en el organismo internacional para poder presentarse a las elecciones presidenciales francesas del año próximo.
Según la legislación gala, Strauss-Kahn tenía de plazo hasta el 13 de junio para declarar sus aspiraciones políticas. Las encuestas le concedían hasta ahora una cómoda ventaja frente al conservador y actual presidente Nicolas Sarkozy.
Cuatro años en el FMI
Strauss Kahn, del Partido Socialista francés, se encontraba al frente del FMI desde 2007, cuando pretendía aspirar a hacer frente a Sarkozy en las elecciones presidenciales francesas pero fue derrotado a la hora de obtener la candidatura de su partido por Segoléne Royal.
Catedrático de Economía de profesión, comenzó su carrera política en el Parlamento francés y fue ministro de Economía durante el Gobierno del primer ministro Lionel Jospin hasta 1999.
Al frente del FMI había ganado numerosos elogios por su liderazgo en la crisis económica mundial y la participación de esta entidad en los paquetes de rescate en la crisis financiera de Europa.
Casado en terceras nupcias con la periodista de televisión neoyorquina Anne Sinclair y padre de cuatro hijos, se había visto envuelto en escándalos de naturaleza sexual con anterioridad y en 2008 se le acusó de haber mantenido una relación amorosa con una de sus subordinadas del FMI, Piroska Nagy.
El Fondo Monetario contrató a un bufete de abogados para investigar las denuncias y Nagy cambió su trabajo al Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo, con sede en Londres.
Strauss Kahn pidió disculpas al personal de la entidad financiera internacional a través de un correo electrónico en el que admitió un "error grave de juicio", pero declaró creer "firmemente que no he abusado de mi posición".
El comité directivo del FMI decidió que la relación se había producido por mutuo acuerdo, aunque calificó las acciones de su director gerente como "lamentables" y que reflejaban un "grave error de juicio".
Strauss-Kahn tenía previsto reunirse este domingo en Berlín con la canciller alemana, Angela Merkel, para tratar sobre la crisis financiera y el rescate internacional a Grecia, un asunto que debía abordar también en Bruselas la semana entrante. El Fondo Monetario Internacional es responsable de un tercio del paquete de rescate financiero para Grecia.