La mayor evacuación en Alemania para desactivar una bomba desde el final de la II Guerra Mundial comenzó hoy en la ciudad de Coblenza, en el oeste del país, donde este domingo 45.000 de sus habitantes deberán abandonar sus casas durante varias horas.
Según Patrick Rott, portavoz de la Cruz Roja alemana, los primeros en ser trasladados a una zona segura fueron los pacientes de las unidades de cuidados intensivos de los hospitales que se encuentran en la zona afectada, a los que seguirán este sábado enfermos ingresados en otros departamentos.
Prácticamente la mitad de la población de Coblenza deberá ser evacuada hasta este domingo, cuando artificieros llevarán a cabo la neutralización de una bomba de aviación británica de 1,8 toneladas de peso, así como de otra estadounidense, de 125 kilogramos, y de una bomba de humo, descubiertas recientemente a orillas del Rin.
El amplio operativo incluye cerca de 2.500 efectivos, entre los que figuran 600 bomberos, 400 enfermeros y 600 conductores para 300 ambulancias, así como 330 policías.
Asimismo participarán miembros de Protección Civil y del Ejército, cuyo número todavía no se ha determinado. El domingo, el transporte ferroviario quedará considerablemente afectado debido a la suspensión durante varias horas de la circulación de trenes, por lo que se habilitará un servicio adicional de autobuses.