Castilla-La Mancha se suma al número de comunidades que han anunciado la flexibilización de las restricciones frente al COVID-19. En su caso, el Gobierno regional ha optado por ampliar el toque de queda hasta la medianoche, aunque mantienen el cierre perimetral de la comunidad y otras medidas para controlar la expansión de la pandemia en vísperas a Semana Santa.
Respecto a la limitación de la movilidad nocturna, antes fijada a las 22:00 horas, se alarga 2 horas más aunque no para la hostelería, que deberá echar el cierre a partir de las 23:00 horas.
En cuanto al confinamiento de Castilla-La Mancha, el consejero de Sanidad de la Junta, Jesús Fernández Sanz, ha explicado que se mantendrá hasta nueva orden, especialmente por la incidencia de coronavirus que tiene su comunidad vecina, Madrid, situada por encima de los 250 casos por cada 100.000 habitantes.
También ha hecho referencia a la movilidad durante la Semana Santa, sobre la que aboga por un conjunto de medidas nacionales para evitar los desplazamientos masivos y mantener controlada la expansión del virus.
Medidas de "nivel 2" frente al COVID-19 en Castilla-La Mancha
Sanz ha explicado que el paquete de medidas adoptado hoy para frenar la pandemia se enmarca dentro del 'nivel 2' de restricciones, excepto en las localidades de Burguillos (Toledo) y Pioz, Sigüenza y El Casar y en la provincia de Guadalajara, que todavía se sitúan por encima del riesgo extremo. En este sentido, mantendrán el cierre perimetral entre municipios, además de otras medidas más restrictivas.
La relajación en el resto del territorio entrará en vigor a partir del miércoles 3 de marzo, que además del toque de queda, contempla la apertura de los centros de día.
Centros de día y residencias de mayores
Sobre esto, el consejero ha insistido en la prudencia y ha pedido a aquellas personas con síntomas de coronavirus o que sean contacto estrecho que eviten acudir.
En cuanto a las residencias de mayores de Castilla-La Mancha, se permitirán ya las visitas de familiares: una hora cada visita y hasta dos veces por semana.
Quedará excluida también la necesidad de presentar una prueba negativa de COVID-19 para acudir a los centros, aunque se deberán respetar estrictamente las medidas de seguridad sanitaria frente a la pandemia.
Ampliaciones de aforo
En cuanto a las escuelas deportivas, las nuevas medidas en Castilla-La Mancha permiten un máximo de 15 personas, incluido el monitor, al tiempo que se aumenta el aforo en los mercadillos, que pasa de un tercio al 50%.
Por otro lado, las visitas guiadas amplían su aforo de seis a diez personas y los espectáculos taurinos podrán celebrarse con un aforo de también el 50%, siempre y cuando sean en espacios abiertos y con un máximo de hasta 500 asistentes.
Por último, las competiciones deportivas de ámbito federativo podrán celebrarse con un aforo máximo del 30% para interiores y hasta un máximo de 300 asistentes. En el caso de que se trate de espacios abiertos, será hasta el 50% y con un máximo de 500 personas.
