Estados Unidos da un paso determinante para salir de Afganistán al abandonar la base de Bágram

Las tropas estadounidenses han comenzado la retirada de una de las bases aéreas más importantes en Afganistán. Se trata de la situada en Bagram. Las fuerzas militares han entregado el aeródromo al gobierno afgano, que se enfrentará a una situación complicada cuando el proceso de repliegue termine.

Todo esto sucede en un momento en el que los ataques terroristas están aumentando en el país. El gobierno afgano tendrá que hacer frente a la situación en solitario, puesto que el resto de las tropas internacionales están siguiendo los pasos de Estados Unidos.

"Todas las tropas de la coalición y estadounidenses partieron anoche de la Base Aérea de Bagram. La base fue entregada a la ANDSF (Fuerzas de Seguridad y Defensa Nacional afganas)", declaró Fawad Amán, Ministro de Defensa. "La ANDSF protegerá la base y la utilizará para combatir el terrorismo", añadía.

La retirada se produce 20 años después de que el país norteamericano comenzase la ocupación. Ha sido una guerra de dos décadas que tuvo como punto de inicio el ataque que sufrieron las Torres Gemelas el 11 de septiembre de 2001.

La base de Bagram como punto estratégico clave

La Base Aérea de Bagram se encuentra situada en Parwan, a 70 kilómetros de Kabul. Ha sido la mayor base de fuerzas extranjeras que ha albergado Afganistán. En 2012, llegó a tener cerca de 100.000 tropas estadounidenses y de la coalición internacional. Fue el punto de mayor ocupación.

También se trata de una de las bases más seguras. Por este motivo, ha sido objeto de diversos ataques. Sin embargo, ninguno ha conseguido finalizar con éxito el intento de entrar en ella. Se trataba de ataques suicidas que ocurrían en la periferia de la base. Además, era un lugar de obligada visita para los presidentes de Estados Unidos cuando realizaban visitas a Afganistán.

Hubo un tiempo en el que fue una cárcel. Sin embargo, tras varias acusaciones de atentar con los derechos humanos por diversas organizaciones internacionales, como Amnistía Internacional, decidieron ceder el control al Gobierno Afgano. Tuvo lugar en 2013.

Cuándo comenzó la ocupación

En 1979, se produjo la invasión soviética en Afganistán. Tras diez años de lucha, en los que se formaron diversos grupos terroristas, iniciaron su retirada. Entre estas formaciones surgió Al-Qaeda. Así los afganos recuperaron el control sobre su propio territorio.

Poco a poco, los grupos islamistas radicales comenzaron a ver a las potencias internacionales como enemigos. A partir de 1996, trataron de realizar varios ataques terroristas contra Estados Unidos. El punto de inflexión fueron los atentados contra las Torres Gemelas el 11 de septiembre de 2001.

Desde aquel momento, el gobierno estadounidense planeó la ofensiva, ya que Afganistán estaba dando cobijo a Osama Bin Laden y otros miembros de Al-Qaeda. Finalmente, la ocupación tuvo lugar el 7 de octubre de ese mismo año. Ha tenido un gran coste económico, puesto que se han destinado muchos recursos a esa guerra. Fue un proceso que denominaron ‘Operación Libertad Duradera’ (EnduringFreedom en inglés).

Proceso de retirada

La administración Trump pactó con el gobierno el inicio de la retirada de las tropas internacionales del país. El acuerdo fue firmado en febrero de 2020, aunque no fue hasta el pasado 1 de mayo cuando comenzó a hacerse práctica. La retirada de la base de Bagram es el inicio. El resto de las tropas lo irán haciendo paulatinamente.

El objetivo es que el país quedé libre de intervención internacional antes del 11 de septiembre. De esta manera, el gobierno afgano tendrá que enfrentarse en solitario a la complicada situación que vive el país. Los ataques terroristas han ido en aumento y parece que seguirán yendo al alza.