La preboda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva: repleta de invitados y con estampa romántica incluida

Todos los focos apuntaron hacia ellos, como si se trataran de estrellas de Hollywood. Tamara Falcó e Íñigo Onieva, los protagonistas de la boda del año, llegaron a su fiesta preboda en el hotel Ritz.

La primera en llegar fue la marquesa de Griñón, en un coche conducido por Fernando Verdasco, su cuñado.

Minutos más tarde llegó Íñigo. El novio entró al Ritz esquivando los flashes, pasaba por la alfombra roja. Su padre Ignacio Onieva, su pareja y Alejandra, la hermana del empresario, también acudieron al evento.

Por el contrario, las madres de los novios prefirieron descansar la noche anterior a la boda. ¿Será que Isabel Preysler querrá estar descansada para el gran día?

Lo que sabemos es que tal como nos confirmó Julio José Iglesias Jr, Preysler ha visto a todos sus hijos pasar por el altar, incluido Enrique Iglesias.

Manolo Falcó, hermano mayor de Tamara y padrino de la boda, les deseaba toda la felicidad a la pareja. “Lo mismo que he tenido en mi matrimonio. Mucha felicidad y amor”.

Chábeli también se mostraba feliz y aunque dijo que le caía bien Íñigo, también revelaba que no lo conocía. “¿Cómo definirías?” Le preguntamos, a lo que ella respondió, “no lo conozco”.

Asimismo, quienes no faltaron a la fiesta fueron los amigos de Tamara como Vicky Martín Berrocal, Eugenia Martínez de Irujo, Carolina Adriana Herrera, Wes Gordon, diseñador del vestido o Juan Avellaneda, íntimo amigo de la novia. Él reveló que le regalará a los novios “una pieza de arte”.

Entre los regalos de la lista de bodas, sabemos que hay saleros y pimenteros bañados en plata o saleros. Los detalles nos los dieron desde la exclusiva tienda encargada para organizar este cometido.

La noche termina con una espectacular salida de los novios del hotel Ritz, escoltados por Ana Boyer y Verdasco. A fuera toda la prensa reclamando una estampa romántica al grito de “beso, beso, beso”. Una imagen que nos regalaron siendo este su último beso como novios.