La familia espera que los restos hallados sean de Ángel: "Tendrán ese dolor toda la vida pero necesitan descansar"

Semanas después de haber comenzado la búsqueda de Ángel en el vertedero de Toledo, la policía ha encontrado restos humanos que podrían pertenecer al menor madrileño que desapareció junto a su primo el 10 de diciembre.

Allí mismo fue encontrado el cuerpo de Fernando, de 17 años, concretamente en las cintas transportadoras.

La última vez que se vio a los jóvenes fue en un centro comercial de Carabanchel, donde estaban comprando con sus familias. En un momento dado, se alejaron diciendo que iban a comer un bocadillo, pero cogieron el metro.

La principal hipótesis es que fueron hasta Toledo para ver a unas chicas de otra familia. Una vez allí les dio frío y se metieron en un contenedor, que, sin ellos darse cuenta, fue transportado por un camión que los llevó hasta el vertedero.

De hecho, los resultados de la autopsia de Fernando confirmaron que el menor falleció por falta de aire y que no fue una muerte violenta. La otra hipótesis que se barajó fue un ajuste de cuentas entre dos familias.

Ahora habrá que esperar a los resultados de las pruebas de ADN para saber si estos restos pertenecen al pequeño Ángel.

José María Fernández ha estado en directo con Antonio, portavoz de la familia, ha asegurado que los padres del menor tienen esperanza de que los restos pertenezcan a su hijo. "Van a tener ese dolor toda la vida pero necesitan descansar ya", ha asegurado. Toda la familia está destrozada y no han celebrado las fiestas.

El padre de Ángel ha hablado con la Policía Nacional y le han contado que mañana les dirán los resultados de la prueba de ADN. Sobre lo que pudo haber ocurrido la familia no sabe nada, pero están ansiosos de saber lo que pasó. "La familia quiere pasar página, descansar y que su hijo esté al lado de su primo", ha dicho.

Carlos Quílez ha contado que se ha pedido que el secreto de sumario se amplíe para poder seguir con la investigación. Hay dos líneas: por un lado, la búsqueda del cadáver y, por otro, lo que ocurrió en Toledo.