No pudo asistir al entierro de su hija por el mal estado de las calles de su barrio: "Llevo una cruz dentro"

A los vecinos del barrio de El Carmelo, en pleno centro de Barcelona, se les hace imposible salir a la calle. Se enfrentan a más de 90 escalones en un estado lamentable, calzadas sin asfaltar, de piedra, en cuesta, inaccesible para ambulancias o incluso repartidores de supermercado.

Allí viven sobre todo personas mayores a las que salir a la calle se les hace un mundo. Concretamente en estas casas viven personas con más de 70 años. La más afectada de todas ellas es Mari Carmen, que lleva 17 años encerrada en su vivienda porque el ayuntamiento no pone solución al estado de las calles.

Mari Carmen nos ha contado que las únicas salidas que ha podido hacer son para ir al hospital porque tenían que operarla. "Y con la ayuda de mi yerno, mi hija y la ambulancia", ha asegurado.

Lo peor de todo es que no puedo asistir al entierro de su hija, que falleció de cáncer hace cinco años. Estuvo meses ingresada, y solo podía hablar con ella por teléfono. "Yo aquí sola y no pude ir a verla", ha dicho entre lágrimas.

Esto es algo que Mari Carmen lleva dentro. "Llevo una cruz dentro desde entonces", ha asegurado.