Investigación abierta

Una inquilina mata presuntamente a la presidenta de su comunidad por una deuda de 500 euros de agua

Pilar era la presidenta de la comunidad de vecinos de un bloque de pisos de Carabanchel (Madrid). Llevaba meses reclamando el pago de varios recibos a los inquilinos que recurrían en impagos. Una de las inquilinas morosas ha sido detenida como presunta autora de su asesinato. Debía 500 euros de agua.

Mata a la presidenta de la comunidad de vecinos.

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Una mujer de 60 años, vecina del barrio de Carabanchel (Madrid) ha sido asesinada tras reclamarle a la supuesta autora del crimen el dinero que debía a la comunidad. La víctima ejercía como presidenta de la comunidad de vecinos en la que también vivía la presunta asesina.

El cadáver ha sido localizado mutilado y calcinado en una escombrera en Las Ventas con Peña Aguilera, Toledo, mientras que la presunta autora de los hechos ya ha sido detenida.

Los vecinos aseguran que el pasado domingo por la noche fue la última vez que tuvieron noticias de Pilar. El crimen se habría producido el lunes cuando los vecinos escucharon golpes muy fuertes de la vivienda de la víctima. La principal hipótesis de los investigadores es que la detenida descuartizara el cuerpo para introducirlo en una maleta y sacarlo más fácilmente de este edificio.

"Se tomó las cosas muy en serio como presidenta de la Comunidad y esto le ha costado la vida"

Espejo Público habla con Ana, vecina del bloque, que asegura que el temblor no se le ha quitado todavía del cuerpo después de conocer esta información. Ángela, conserje del edificio, cuenta que la víctima era la presidenta de la comunidad desde el pasado mes de noviembre: "Se tomó las cosas muy en serio y esto le ha costado la vida", lamenta.

La presunta asesina tenía una deuda de 500 euros en facturas del agua con la comunidad

Cuenta esta vecina que en los últimos 5 meses se celebraron varias reuniones extraordinarias por problemas de dinero en la comunidad. Había varios impagados y esta chica era una de ellas. "Creo que eran recibos de agua. Debía dinero y se le pedía". Apunta además que la presunta asesina trataba de esquivar a la víctima diciendo que ya había pagado los recibos, que ascendían a unos 500 euros, diciendo que habría algún tipo de error en el banco.

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