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14.000 HECTÁREAS QUEMADAS

El Govern ve "perspectivas mucho más optimistas" para contener el fuego

Una imprudencia ha tenido un coste enorme. Unas colillas han provocado el incendio del Alt Empordá que ha dejado cuatro víctimas mortales y 14.000 hectáreas quemadas. La Generalitat cree que Hoy podrían sofocarlo, con la ayuda de la bajada de las temperaturas y de la velocidad del viento. Anoche, un grupo de campistas fue desalojado por precaución.

A estas horas siguen activos los incendios de Cataluña, en Portbou el fuego está controlado pero lo peor se está viviendo en la zona de la Jonquera, allí el fuego continúa fuera de control y ha afectado ya  a 14.000 hectáreas, unos 70 kilómetros de bosque y avanza hasta Figueras.

Los esfuerzos se centran en evitar que las llamas empujadas por el vientoo lleguen a la comarca de la Garrocha, un espacio natural con espesa vegetación. Los trabajos de extinción han continuado durante toda la madrugada y con las primeras luces del día se incorporarán los medios aéreos. La esperenza de bomberos y equipos de emergencia están puestas hoy en la meteorología.

Las previsiones anuncian que el viento contra el que se lleva dos días luchando amaine y permita acceder a zonas hasta ahora imposibles por la virulencia de las llamas.  La bajada de temperaturas de hasta diez grados en las próximas horas dan una visión más optimista para esta jornada.

El consejero de Interior, Felip Puig, ha asegurado que las condiciones meteorológicas permiten tener unas perspectivas "mucho más optimistas" de cara a las tareas para intentar controlar el incendio del Alt Empordà, y ha señalado que se espera progresar para contener el fuego durante este martes.

"Sin estar bajo control, esperamos progresar decididamente para contenerlo durante el día de mañana", ha afirmado Puig en declaraciones a los medios desde el centro de mando en Figueres, y ha indicado que los esfuerzos se concentrarán en los municipios de Terrades, Darnius y el pantano de Boadella, así como en Cantallops, Vilanant y Cistella, con el objetivo de que el fuego no alcance la Alta Garrotxa.

La orden de confinamiento se ha levantado en la mayoría de los municipios cercanos a las llamas, pero todavía quedan vecinos que han pasado la noche refugiados en polideportivos. Algunas de estas personas estaban pasando unos días de camping.

Las dimensiones del incendio se sienten en ciudades alejadas de las llamas como Girona o Barcelona. El olor a humo y a pino quemado ha llegado a las calles de la ciudad condal situada a unos 150 kilómetros del fuego.

 

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