El incendio del Alt Empordà se encuentra en fase de control tras devastar unas 14.000 hectáreas, y podría darse por controlado en la tarde del jueves si se mantienen las condiciones meteorológicas favorables, ha indicado el delegado de la Generalitat en Girona, Eudald Casadesús.
Fuentes de los Bomberos han señalado que las condiciones de trabajo de la noche han sido buenas y tranquilas para los efectivos que están desplazados, que se ha trabajado con comodidad, y que también se han hecho tareas de vigilancia.
Los equipos de extinción siguen trabajando al sur del embalse de Boadella, la parte más sensible, pero también se continúa actuando y refrescando todo el perímetro del incendio. Precisamente de este embalse se han conocido datos en referencia a su caudal.
El embalse de Boadella ha perdido 2,5 hectómetros cúbicos de agua, 2.500 millones de litros, desde el domingo hasta este jueves, como consecuencia directa del grave incendio, dado que numerosos medios aéreos cargaron agua en este lugar para luchar contra el fuego --en el punto álgido hasta 30 hidroaviones y helicópteros lucharon contra las llamas.
En la zona siguen trabajando una treintena de dotaciones de los Bomberos, 28 de la Unidad Militar de Emergencias y ocho de los bomberos franceses, que continuarán trabajando hasta el mediodía.
Los 17 ayuntamientos afectados por el fuego trabajan ya para elaborar un listado de daños y trasladarlos a la reunión prevista para mañana en la sede del Consell Comarcal del Alt Empordà, a la que asistirá la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega.
Un detenido
El presunto responsable del incendio que el pasado martes se declaró en Girona en la sierra de las Gavarres, que hizo saltar la alarma por coincidir con los que asuelan el Alt Empordà, ha sido detenido, según informan los Mossos d'Esquadra.
Los hidroaviones que trabajaban en aquel momento en el fuego del Alt Empordà, que tenía como punto más conflictivo los alrededores del embalse de Boadella, pudieron desplazarse hasta el término de Cruïlles, Monells y Sant Sadurní de l'Heura, en el Baix Empordà, donde se declaró ese otro incendio que rápidamente fue contenido.
Un día después, los Mossos d'Esquadra detuvieron a Raúl F.F., de 36 años y nacionalidad española, como presunto autor del incendio, ya que es el arrendatario de la masía junto a la que comenzaron las llamas y donde los agentes encontraron una plantación de marihuana con unas 250 plantas.