Protestas en Cataluña por los recortes en la sanidad pública

Las respuestas a los recortes presupuestarios en la sanidad catalana se suceden. El personal del Hospital del Mar y el de la Esperança participan en una huelga para frenar el ERE sobre 194 trabajadores. El 68% del personal del Hospital del Mar y de l'Esperança -65% y 72%- han secundado la protesta.

Todo llegó tras el anuncio de Artur Mas de recortar el presupuesto destinado a Sanidad Pública en un 10%, lo que supondrá un ahorro de mil millones de euros. Se cerrarán uno de cada diez centros de atención primaria, algo que ha provocado la alarma entre los ciudadanos. La oleada de cierres hará que decenas de miles de catalanes tengan que recorrer hasta 25 kilómetros para recibir atención sanitaria.

Las clínicas privadas no esperan más clientes
La Asociación Catalana de Entidades de Salud considera que los recortes de la Generalitat en el sector público sanitario no se traducirán en un mayor número de clientes en las clínicas privadas.En una entrevista a EFE, Cristina Contel, presidenta de la asociación, que integra 131 centros sanitarios, ha asegurado que la tendencia a la baja de las pólizas individuales y familiares se mantendrá durante este ejercicio, pese al recorte presupuestario en la sanidad pública y a sus efectos en las listas de espera y los servicios ofrecidos.

"La lógica consecuencia es pensar que la sanidad privada funciona cuando la pública no va bien, pero su función es complementar y coordinarse con la salud pública", ha apuntado Contel, que remarca que "los centros privados no tienen recortes, pero están sufriendo la misma crisis económica".

Para la presidenta de las clínicas privadas, actualmente la capacidad adquisitiva media de los ciudadanos no ayuda a encontrar nuevos clientes, y augura que los precios con los que trabajan los servicios privados de salud en Catalunya seguirán ajustándose. De hecho, la Asociación Catalana de Entidades de Salud va más allá y apunta que los ajustes en la gestión pública se traducirán en daños colaterales para la privada y una caída de precios todavía más ajustada.