Un café con Susanna
La nueva vida de Rodrigo Rato tras su paso por la cárcel: "Medito cada mañana, lo importante es la constancia"
Rodrigo Rato se sienta en el plató de Espejo Público después de publicar su libro 'Hasta aquí hemos llegado'. En este libro, el que fuera presidente de Bankia y exdirector gerente del FMI, hace balance de su paso por la cárcel y de los errores del pasado. "Medito cada mañana entre 30 y 20 minutos", relata.
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Rodrigo Rato publica a dos manos con su mujer, Alicia González, el libro 'Hasta aquí hemos llegado'. Aún tiene un juicio pendiente por el que Fiscalía Anticorrupción le pide 70 años de cárcel, sin embargo Rato tiene confianza en la justicia y cree que después de 7 años de instrucción ha planteado argumentos suficientes para estar tranquilo. Sigue creyendo en la justicia a pesar de su paso por la cárcel por el 'caso Bankia'.
Sí cree que la instrucción del 'caso Bankia' dejó mucho que desear. "Me quejo de que los errores para los ciudadanos se pagan y en la administración los errores se pagan menos. Está bien que la administración tenga mucho poder pero cuando se equivocan debe haber un riesgo que está muy desequilibrado en España en este momento", señala.
"El juez se negó a aceptar que el Banco de España es la autoridad del Estado en temas bancarios"
"El Banco de España no fue lo agresivo que podía serlo pero tenía miedo a que el juez despreciara sus opiniones. El juez se negó a aceptar que el banco de España es la autoridad del Estado en temas bancarios y es la opinión auténtica. Al contrario que otro juez que lo primero que hizo fue pedir un informe al Banco de España y cuando lo recibió cerró el caso", recuerda.
La imagen de su detención en abril de 2015 dio la vuelta al mundo. Cree que era una "bonita operación pensada por el Gobierno de aquel momento" que avisa a las televisiones. "La prensa llega antes de que llegue la Policía", afirma.
"La filtración de datos marcó un precedente gravísimo"
Sufrió la filtración de datos y cree que tiene que haber responsabilidades y que es un precedente que arrancó en esa época. Califica como "gravísimo" que nuestros datos fiscales puedan estar saliendo en los medios de comunicación y es una violencia contra la intimidad de las personas inaceptable. Se acogió a la amnistía fiscal para regularizar una situación que había heredado con el dinero de su padre. "Hice mal en fiarme de la ley que había sacado el Gobierno. Como yo lo hicieron otros y el único nombre que se supo fue el mío".
Rato repasa su papel en el 'caso Bankia'
"El Gobierno decidió nacionalizarnos y lo hizo de una manera tan brutal que la acción se desplomó y los depósitos más libres salieron corriendo. Eso sucedió después. Este es un caso en que se interviene un banco antes de que la acción caiga y antes de que se retiren los depósitos", señala. Rato se queja del fuego amigo de que el Gobierno pidiera un informe al FMI para saber cuál es la solvencia de Bankia. Ha sido ministro de economía y director gerente del FMI y no cree que ningún Gobierno haya pedido una nota pública que pueda perjudicar a su sistema financiero.
Rato reconoce algunos errores que cometió en su época en Bankia como no estudiar bien las tarjetas antes de usarlas, cuando aceptó el plan de fusiones del BCE y dinero público cuando había otros colegas que no querían, no haberse marchado cuando se planteó la fusión, no haber escuchado a quienes le advertían de cosas que podían producirle problemas y reaccionó de "una manera arrogante". "He cometido muchos errores cuando uno tiene problemas, además de los demás uno tiene su parte".
"Nadie te asegura que las cosas vayan a ir bien siempre"
Su paso por la cárcel le ha hecho reflexionar sobre el karma. Cree que la vida da vueltas para quienes tienen buen karma hasta quienes tienen mal karma: "nadie te asegura que las cosas siempre vayan a ir bien. No hay que confundir el mal karma con la mala suerte".
"En la cárcel meditaba en grupo porque genera mejor karma"
En su paso por la cárcel Oriol Junqueras le daba clase física cuántica y desayunó durante 2 años con Luis Bárcenas. "Recuerdo a Oriol aquellos domingos por la tarde en que nos daba clase de física y acababa hablando de la historia de Occidente". En la cárcel aprendió a meditar con otros y cree que genera buen karma hacerlo en grupo. Medita cada mañana entre 20 y 30 minutos. "Lo importante en la meditación es la constancia. No se consigue nada una sola vez, es cuestión de constancia y de ir generando karma bueno en vez de generarlo malo".
Ahora vive como jubilado defendiéndose de la acusación de la Fiscalía anticorrupción, disfruta de su familia y de sus hobbies. "Voto siempre a los míos pero ahí no soy constante", apunta.
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