Salud y bienestar
Cirugía estética responsable: "O yo estoy muy bien, o algunas están muy mal"
La colaboradora de Espejo Público Sofía Cristo, ha realizado un reportaje en el que explica los tratamientos a los que se somete.
- El precio de querer vivir: “Pagaré 11.500 euros cada tres semanas por mi tratamiento para el cáncer”
- Vanessa se emociona hasta las lágrimas al descubrir que le pagarán su operación de cirugía estética por obesidad tras perder 80 kilos: "Solo quiero ser normal"
- La discriminación estética de un hostelero: "¡Ni se te ocurra contratar a camareras feas!"
Publicidad
Sofía Cristo se considera una persona coqueta aunque reconoce que se mira "lo justito" al espejo: "Soy coqueta, me cuido. Me gusta estar guapa, sentirme bien conmigo misma. Creo que es fundamental".
Después de los momentos de tensión que protagonizaba en el programa de Espejo Público de este viernes, Sofía comparte que hace para reponerse y desconectar.
¿Demasiada importancia al físico?
A sus 41 años, que admite haber cumplido, después de días intensos de trabajo, Sofía explica que alguna tarde se va a realizar un tratamiento para sentirse "un poquito más guapa".
La colaboradora y DJ opinaba que actualmente y en general, sí se daría más importancia de la que debieran tener al físico y a la imagen. Confesaba lo siguiente: "A mi me importa más a nivel personal. Sentirme bien conmigo misma creo que es importante".
Que en su día Bárbara Rey, su madre, fuera todo un referente de belleza nacional la habría influido, como ella misma admitía.
Tratamientos pasados y fallidos
"Siempre he sido un poco el patito feo y eso me hacía sentir un poquito más acomplejada, y me gusta cuidarme", admitía Sofía, que también reconocía que tuvo un mal asesoramiento cuando decidió inyectarse silicona en los labios. Contaba su mala experiencia: "Se me empezaron a rajar, me causaba muchísimo dolor. Decidí hacerme una intervención quirúrgica y quitarme la silicona. Y no me pincho absolutamente nada en los labios".
"Me voy haciendo mayor"
Sofía Cristo aseguraba que no se ve haciendo yoga facial y al mismo tiempo que se tocaba la cara para estirarse la piel admitía: "Esto me lo haré en algún momento", en clara referencia a un 'lifting'.
Medicina estética de responsabilidad
Después de todo lo que había reconocido afirmaba que ha hecho siempre uso "de una medicina estética muy responsable": "La primera vez que me pinché fue con 35 años".
Definía sencillamente la medicina estética responsable como "unas cosas muy naturales". Sofía contaba que se aplica tratamientos faciales en lugar de recurrir a métodos invasivos como aplicarse inyecciones para 'inflarse' la cara, algo que no le gustaría.
Operaciones cada vez más frecuentes entre la juventud
No comparte la moda de personas veinteañeras, que por someterse a cirugías estéticas tienen "todas la misma cara". Hace referencia a los complejos que niega tener hoy, pero sí haberlos padecido durante su adolescencia: "Mis granos, tenía la cara como un pan, y bueno, estaba un poco 'rellenita'".
A día de hoy Sofía se encontraría bien consigo misma: "A pesar de todas la cosas mediáticas que hayan por ahí, tengo una vida espectacular. Se nota en la cara".
En manos de profesionales responsables
Sofía deposita su confianza en una médico especializada en estética y también farmacéutica, Ana, que abogaba por una medicina estética responsable y defiende que su fin debe ser "mostrar la naturalidad de la belleza de cada uno".
Más Noticias
- Del 'francosfera' de Ayuso a los despistes de Sánchez y alguna canción: Vuelve 'El Apunte'
- Verónica consigue desalojar de su casa a un inquiokupa: "Me ha destrozado la casa"
- Indignación tras el archivo del caso de las gemelas que intentaron suicidarse juntas: "Le quitaron las ganas de vivir hasta preferir saltar"
Otro tipo de opciones son responsables de consecuencias que como ella misma explicaba: "Por desgracia nos encontramos con efectos adversos, sobre todo producidos por una mala praxis".
Publicidad