El sexto dedo, el sensacional descubrimiento de Marron en ‘El Hormiguero 3.0’

Hoy tenemos con nosotros a Dani Clode, una chica de Nueva zelanda que vive en Londres, donde ha desarrollado una idea super innovadora que veréis a continuación.

Se trata de una extensión en forma de dedo, es decir otro pulgar, que se acopla a la mano en el lado donde no tenemos pulgar. Se controla con unos botones (sensores de presión) que ella lleva incorporados en sus botas.

La idea se le ocurrió porque le parecía interesante añadir más miembros al cuerpo y qué otras cosas podríamos hacer con ellos, así que su proyecto del master lo encaminó por aquí. Ella piensa las muchas cosas que se podrían hacer teniendo miembros extra. Se dió cuenta que el nombre “prótesis” en griego significa “en adicción” no “arreglar algo”

Normalmente las prótesis de la mayoría de los proyectos son para personas amputadas y se controlan con los músculos de los muñones de estas personas, pero en este caso eso no era posible porque tienes la mano entera, de modo que buscó la mejor manera de controlarlo sin que fuera muy aparatoso (mochila, cinturones, etc) y que interfiriera lo menos posible en las actividades del día a día, entonces se le ocurrió que escondiendo los botones en los zapatos era su mejor opción.

Tiene varios prototipos y todos ellos están impresos en 3D.

Una vez terminado el proyecto se puso en contacto con el instituto de neurociencia cognitiva de Londres para hacer estudios sobre cómo reacciona el cerebro con nuevos miembros, y es en la dirección que quiere seguir la investigación porque en los estudios donde les ponía a la gente el dedo durante 2h y se la quitaba otras 2, ellos mismos sentian que les habian amputado algo.