La Guardia Civil de Pontevedra, en colaboración con la Policía Local de Vigo, ha interceptado 500 toneladas de cable de cobre utilizado para dar servicio público de red eléctrica y comunicaciones.
La Guardia Civil ha imputado a un total de 19 personas de la provincia de Pontevedra por un delito continuado de receptación y distribución de material robado, y a otras 50 personas por apropiación indebida.
En la mayoría de los casos, estaban vinculados a chatarrerías y empresas de reciclaje que se dedicaban a la compra y venta del material de ilícita procedencia. La investigación, desarrollada en los últimos seis meses e instruida por el Ministerio Fiscal, implicó a un equipo de más de medio centenar de agentes de los distintos Grupos y Especialidades dela Guardia Civil y la Policía Local de Vigo.
La operación, denominada 'CR29', ha posibilitado que descendieran de forma considerable los delitos y denuncias relacionados con la venta del cobre ilegal.