City de Londres

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EN REINO UNIDO

Llamar a las puertas de los ricos cambió la vida de un joven en Londres

Reggie Nelson era un chico sin recursos que consiguió entrar en el mundo de las finanzas. Actualmente, dedica su vida a que otras personas, en particular jóvenes negros, puedan entrar en el sistema financiero.

Reggie Nelson, un joven de 17 años que vivía en una zona de clase trabajadora de Londres, decidió ir a la urbanización más exclusiva de la capital británica y llamar a la puerta de cada una de las mansiones.

"Lo que le decía a la gente cuando les tocaba el timbre era: 'Mi nombre es Reggie y soy del este de Londres. Vine a Kensington y Chelsea porque investigué que este es el área más rica de Reino Unido. Y sólo quería saber qué habilidades y destrezas tuvo para llegar a vivir en una zona de abundancia como esta. De esa manera, podré extrapolarlas y usarlas para mí mismo'", según contó a la BBC el joven, que ahora tiene 23 años.

"En esa época todavía estaba cursando la educación preuniversitaria y me dije: '¿Cómo puedo hacer algo diferente? ¿Qué puedo hacer que sea realmente diferente para ver resultados, algo que nadie más pensara en hacer?".

Los padres de Reggie son originarios de Ghana. Él nació en Reino Unido y la idea que se le ocurrió surtió efecto: "Entré en una calle privada y en la segunda puerta que toqué, una señora me habló por el intercomunicador. Abrió la puerta y me invitó a entrar". Tras pasar a la casa, la señora, rubia y llamada Elizabeth, lo llevó a una sala.

"Cuando estábamos hablando, entró un señor. Se trataba de Quintin Price. En esa época era el director de Alpha Strategies, en BlackRock". BlackRock es una corporación estadounidense de manejo de inversiones globales cuya sede está en Nueva York.

Price es un experto en el área de las finanzas y las inversiones, graduado en la Universidad de Oxford y que había pasado por altos cargos en la banca internacional, como en Deutsche Bank. Tras conversar con él y su esposa, Quintin se ofreció a ser el mentor del adolescente. Dos semanas después, el experto en finanzas le ofreció a Reggie una prueba en la compañía financiera.

"Llegué tempranísimo. Fui el primero. Llegué una hora antes porque quería causar una buena impresión. Fue maravilloso ver tanta gente joven y brillante", dice. "Incluso antes de ir para allá, no tenía la menor idea que podías sacar una A+ en los exámenes de admisión universitarios. Yo pensé que la A era la calificación máxima que se podía obtener, pero estos chicos me estaban diciendo: 'Yo saqué tres A+ y cuatro A+".

Y la pregunta inevitable surgió: ¿Cómo fueron sus calificaciones cuando salió de la educación preuniversitaria? "Todavía estoy estudiándola, no la he terminado", respondió.

Reggie conversó con su madre sobre la experiencia y siguió una recomendación de Quintin: ir a la universidad porque eso le daría la mejor oportunidad para trabajar en los servicios financieros. El joven se graduó con honores en la Universidad Kingston y desde entonces se propuso ayudar a otras personas a entrar en el sistema financiero, y en particular a que más jóvenes negros puedan ingresar en espacios corporativos.

El joven ofrece charlas sobre su experiencia con el objetivo de inspirar a más jóvenes negros a cambiar su historia para que, a su vez, ellos inspiren a mucha más gente y da un consejo: "No tomes los 'noes' como un evangelio, úsalos y aprovéchalos. Úsalos como tu gasolina para seguir adelante hacia donde necesitas llegar".

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