La manifestación que este domingo reunió a centenares de personas, muchos de ellos funcionarios, para protestar contra los recortes se saldó finalmente con la detención de una persona acusada de resistencia y desobediencia.
Se espera que a lo largo del día se tome declaración a este joven y, como ha pasado con otros detenidos en las protestas que se han venido desarrollando en los últimos días contra los recortes y sin permiso de la Delegación de Gobierno, quedará en libertad o pasará a disposición judicial.
Miles de funcionarios se han manifestado en el centro de Madrid para protestar contra los recortes del Gobierno. Tras la reivindicación, un grupo de unos doscientos trabajadores de la Administración se concentró en la Plaza de Neptuno y mantuvo cortado el tráfico del Paseo del Prado en dirección sur.
Dos horas después fueron desalojados de forma pacífica por la policía. Un portavoz de los acampados señaló que los agentes han identificado a algunos de ellos y, con actitud amable, les han ido separando en grupos que se han dispersado por las calles cercanas.
Este lunes continuarán las movilizaciones. Los trabajadores municipales de Madrid llevarán a cabo una marcha fúnebre en protesta por los recortes anunciados por el Gobierno, y a la cabeza de ese apoyo se sitúa el alcalde popular de Robledo de Chavela.
Los funcionarios tenían pensado acampar frente al Congreso
La manifestación se inició en las inmediaciones del Congreso de los Diputados, blindado por la Policía, en protesta por los últimos recortes del Gobierno, como la supresión este año de la paga extra de Navidad a todos los empleados públicos y la reducción de los moscosos.
Aunque la convocatoria inicial era para acampar frente al Palacio de las Cortes, las fuerzas de Seguridad vallaron la zona e impedido el acceso a los manifestantes, reunidos en las cercanías desde las ocho de la tarde.
Policías, bomberos, profesores, sanitarios o trabajadores de la Administración pública se han sumado a esta protesta, en la que se corean gritos en contra del Gobierno y se pide la dimisión del presidente, Mariano Rajoy.
Acompañados de pitos y tambores, los manifestantes corearon gritos como "Manos arriba, esto es un atraco" o "Menos crucifijo y más trabajo fijo", y en varias ocasiones se dirigieron a los antidisturbios que custodian la zona del Congreso para invitarles a sumarse a la protesta.
Los funcionarios también han sido protagonistas en las redes sociales, especialmente de Twitter, después de que la etiqueta #graciasfuncionarios se haya convertido en uno de los temas del día con las aportaciones de miles de ciudadanos y sus agradecimientos a los empleados públicos.
