"Imaginé que mataba a mi familia": ¿Qué es el 'TOC de hacer daño'?

El testimonio que aporta Ari, sorprende por su juventud y resulta sobrecogedor por las dificultades y obstáculos que plantea, para el desarrollo de su día a día, el trastorno que padece.

La joven explica el infierno en el que llegaba a vivir y el alterado estado de nervios que sufría: "Una personas se obsesiona con 'TOC de hacer daño' se obsesiona con cosas como el pensamiento o la imagen de acuchillar o apuñalar a alguien a quien queremos muchísimo".

Ese tipo de ideas intrusivas que asolaban a Ari la llevaban en ocasiones a plantearse las siguientes preguntas: "¿Y si soy una asesina?, ¿y si mato a mi perro? ¿Y si asfixio a mi novio?"

"¡Dios mío! Y si me levanto sonámbula por la noche, cojo un cuchillo y me hago daño"

La inquietud que sentía la joven ante la posibilidad de perder el control en un momento dado y cometer algún acto de fatales consecuencias, llegaba incluso al punto de verse obligada a colocar grandes objetos a modo de barrera, con el fin de evitar hacer daño a sus compañeros en una residencia de estudiantes en la que vivía en Valencia.

"Evitar que pueda llegar a pasar"

La chica explicaba en qué consiste exactamente este subtipo de Trastorno Obsesivo Compulsivo. Como tal, esta patología seguiría los mismos patrones de obsesiones y compulsiones, y según ella, suele diagnosticarse en personas con mucha empatía y básicamente provocaría un miedo enorme a perder el control de uno mismo.

Estos temores no tendría nada que ver en absoluto con "fantasear" con la violencia o ser una persona violenta o agresiva y de hecho aseguraba no haber protagonizado "nunca" ningún episodio de ese tipo.

"Con este tipo de TOC, tú lo que quieres realmente es que las personas que quieres y tú, estéis a salvo, estéis bien" Ari

"Tu no puedes controlar que otras personas hagan daño, pero sí puedes controlar no hacerlo tú. Por eso la compulsión va a ser incluso alejarte de esas personas o de objetos punzantes. Evitar todo lo posible que eso pueda llegar a pasar", relataba Ari.

"Pensaba que me iban a encerrar"

Ari cuenta que no compartía ese tipo de pensamientos porque pensaba que estaba loca y temía ser 'encerrada'. Sin embargo cuando la recurrencia de esas ideas aumentó, buscó información y decidió ponerse en manos de profesionales y normalizar su situación.

Problemas añadidos

La joven admitía sí compartir con terceras personas otros temas, como una depresión que atravesó y más adelante contaba que previamente había sufrido también trastornos con la alimentación. Problemas que podrían estar relacionados entre sí, y sobre los que aconseja a través de las redes sociales, en base a su experiencia.

Tratamiento de éxito

Actualmente ya no precisa de medicación, pero sí lo ha hecho durante un largo periodo de su vida, y poco a poco han podido ir retirándosela. Hoy en día asegura que el éxito de su tratamiento hace que en episodios puntuales, cuando su situación lo requiere, sólo con ayuda de la terapia consigue superarlos.

La madre de Yeremi Vargas se enfrenta al sospechoso por la desaparición de su hijo: "Dime dónde está"