Los hombres que cambiaron el socialismo
El esperado reencuentro entre Felipe González y Alfonso Guerra
La relación entre Felipe González y Alfonso Guerra ha tenido muchas idas y venidas y muchos giros de guión, pero vamos a tener la oportunidad de verles juntos por primera vez desde hace mucho tiempo. Entre las cosas que les unen en ese momento, están las críticas al Gobierno por la ley de la amnistía y sus pactos con el independentismo.
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Felipe González y Alfonso Guerra se conocieron en la universidad de Sevilla en 1962, en un boicot por una visita de Fraga a la Universidad ¿qué estaba pasando en España en 1962?
Mientras el dúo dinámico cantaba: "somos jóvenes"Dos jóvenes sevillanos se conocían en los círculos universitarios antifranquistas era 1962. A la vez que los Beatles sacaban su primer single, ellos forjan una amistad que culmina en el tándem político perfecto.
Tándem político
Felipe era el magnetismo y la ilusión de un nuevo proyecto político. Alfonso, el aparato del partido y el ácido azote de la oposición. En 1974, con apenas 30 años, toman las riendas del PSOE en el histórico congreso en la ciudad francesa de Suresnes. Corren vientos de cambio y los dos dirigentes negocian la transición democrática desde el partido socialista
Durante esos años casi nunca coinciden en los mítines para mantener el nivel de movilización socialista. Juntos llevan al PSOE a la victoria de 1982 e inician un cambio profundo en la España de los 80 y 90
Y llega el divorcio
Pero ese idílico matrimonio se rompe al hacerse público el escandalo de corrupcion y trafico de influencias del hermano de Alfonso Guerra. Inicialmente Felipe toma partida personal por el vicesecretario del PSOE
Pero el affaire no deja de crecer y la pareja acuerda la separación de bienes... uno al gobierno y el otro al partido.
El pacto no funciona y en 1991 llega el divorcio definitivo. La amistad se rompe y desde ahí la pareja solo se habla en presencia de toda la familia
Mientras en las radios triunfa el "Amigos para siempre"... Felipe y Alfonso acuden al que sería su último gran mitin juntos en las Ventas por el décimo aniversario del triunfo socialista. Tienen que pasar 15 años para asistir a fríos reencuentros que certifican que la herida no ha cicatrizado, pero normalizan la relación.
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Ahora tras mucho tiempo de incomunicación ambos se alinean en la crítica al actual PSOE. Recordando, quizá, el título del último libro que presentaron juntos... los buenos y viejos de su generación
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