Crece el número de altas fraudulentas en compañías telefónicas

Raquel es una de esas víctimas. Llamó a una compañía de teléfono para cambiar y, en esa llamada se enteró de que debía cientos de euros. Cuando pidió una copia del contrato de alta que hizo en su día y la empresa le respondió que no había ningún contraro de permanencia. Según las organizaciones de consumidores, siempre debe de haber un contrato para facilitarselo a los usuarios cuando lo reclamen .

En ocasiones, los propios comerciales de estas compañías se inventan altas para cumplir objetivos, y en otras ocasiones, terceras personas dan de alta una línea con los datos de otro. "Es relativamente fácil hacer esto, ya que nunca te van a pedir una firma por teléfono. Solo tienen tu grabación de voz".

Mientras tanto, Raquel ya ha sido inscrita en dos listas de morosos por lo que no puede abrir una cuenta, ni comprar algo a plazos, ni financiarse.