Crimen
El conde de Atarés que presuntamente mató a su pareja y a una amiga de esta tenía un arsenal de armas en un altar con símbolos nazis
Fernando González Castejón, conde de Atarés, asesinó a su mujer, a una amiga de ésta y posteriormente se suicidó. Quienes le conocían aseguran que tenía una doble personalidad: encantador en los bares en los que alternaba y una persona muy problemática de puertas para dentro.
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Fernando González Castejón, conde de Atarés, tenía un arsenal de amas en su casa pero carecía de licencia: 2 escopetas de aire comprimido, armas blancas como navajas, una pistola de 9 milímetros, un arco, una espada y silenciadores. Las armas estaban expuestas en un altar con simbología fascista. Los investigadores han encontrado en el domicilio fotografías de Franco y Adolf Hitler. Los vecinos dicen que llegaba incluso a hacer prácticas de tiro en el propio patio comunitario.
El conde de Atarés mató presuntamente a su pareja y a una amiga de esta y posteriormente se quitó la vida. Luis Fernando Durán, periodista de El Mundo, ve muy sorprendente que pudiera tener todas esas armas en su domicilio. Asegura que nunca hubo una denuncia formal por posesión o tenencia ilícita de armas. A pesar de que los vecinos cuentan que en ocasiones salía con la escopeta de balines a disparar al patio comunitario nunca se interpuso una denuncia forma el comisaría.
No constaba que la víctima estuviese registrada como maltratada. Sí hubo un incidente en el que la Policía intervino en la relación del presunto asesino y su pareja, pero lo hizo de oficio. En un bar de la calle Serrano el presunto asesino insultó y vejó a su pareja, por lo que varias personas llamaron a la Policía. Los agentes intervinieron de oficio pero la mujer no le quiso denunciar cuando se celebró la vistilla días después.
Espejo Público ha tenido acceso a la tarjeta de visita del marqués. En la tarjeta tacha los títulos nobiliarios que le correspondían por herencia. Le define como una persona muy popular que dejaba grandes propinas en los bares sin embargo de puertas para dentro era una persona problemática con sus vecinos. "Tenía 2 personalidades. Fuera y dentro de su casa. Comenta el periodista Luis Fernando Durán que en los últimos tiempos algún vecino les decía que bebía mucho y que él mismo se justificaba diciendo que estaba deprimido, que estaba pasando una época mala pero que lo iba a superar muy pronto".
Los investigadores tratan ahora de determinar las causas del crimen. La autopsia determinará además si el presunto asesino había consumido drogas antes de disparar a las mujeres.
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