Tapas de váter como bandejas para protestar por la subida de las tasas a bares

El servicio de terraza en los bares de L'Arboç es un tanto peculiar. En los alrededores de las cafeterías de la localidad se puede ver a gente con tapas de váter colgadas del cuello, a modo de pequeña mesa. No es que se hayan vuelto locos, si no que lo hacen a modo de protesta por la subida de las tasas de ocupación de la vía pública. Denuncian que se han multiplicado por diez.

Rufino, un hostelero de L'Arboç, pagaba 300 euros al año por abrir su terraza, ahora pagará casi 3.000. "No podemos consentir que nos cobren eso, no nos salen los números", explica otra empresaria.

Han cerrado todas las terrazas, apilado las mesas, y creado esta curiosa arma reivindicativa, bautizada como 'terraza móvil'.  "No es cómodo ni apetecible, pero es a lo que nos obligan", cuenta un cliente. Según la normativa pasarán de pagar cinco céntimos a un euro por metro cuadrado. El ayuntamiento estudia implantar bonificaciones para evitar la polémica.