El presidente estadounidense, Barack Obama, se mostró "muy conmovido" tras visitar la antigua prisión de la isla de Robben, donde el icono de la lucha contra el 'apartheid' (segregación racial) Nelson Mandela estuvo encarcelado 18 años.
"En nombre de nuestra familia, estamos muy conmovidos por haber estado donde hombres de tanto coraje se enfrentaron a la injusticia y se negaron a rendirse", escribió Obama en el libro de visitas de la isla, situada frente a las costas de Ciudad del Cabo, en el suroeste de Sudáfrica.
Obama visitó Robben Island con su mujer, Michelle, y sus hijas, Malia y Sasha, en el segundo y último día de su visita a Sudáfrica. Los Obama, que tuvieron de guía a Ahmed Kathrada, antiguo prisionero de la cárcel, homenajearon de esta manera al expresidente sudafricano Nelson Mandela, que a sus 94 años pasa este domingo su octavo día en estado crítico en un hospital de Pretoria.
Tras rendir tributo a Mandela, Obama visitó en Ciudad del Cabo un centro comunitario dedicado a la lucha contra el sida, acompañado por el arzobispo emérito de la ciudad y premio Nobel de la Paz 1984 Desmond Tutu. Obama cerrará sus actos oficiales en Sudáfrica con un discurso en la Universidad de Ciudad del Cabo.
Durante su estancia ayer en Pretoria y Johannesburgo, en el noreste del país, el primer presidente negro de EEUU calificó al primer presidente negro de Sudáfrica de "inspiración para el mundo", tras lo que se reunió con miembros de su familia en privado en la sede de la Fundación Nelson Mandela.
En otro de los actos de ayer, Obama puso a Mandela de ejemplo para los estudiantes ante los que habló en el antiguo gueto negro de Soweto (Johannesburgo).
"El futuro del continente está en vuestras manos", proclamó el líder estadounidense ante el joven auditorio, en un acto lleno de simbolismo. Obama concluirá el próximo martes en Tanzania una gira africana que comenzó el miércoles pasado en Senegal y continuó este fin de semana en Sudáfrica.