Es el mayor infanticidio descubierto en Francia en los últimos 30 años. Un matrimonio ha sido arrestado al norte del país por haber matado y enterrado a 8 de sus bebés en el jardín de su casa. La mujer ha confesado haberlo hecho porque eran hijos no deseados.
No es la primera vez que ocurre algo así en el país galo. Otra mujer fue condenada -el pasado mes de marzo- a 15 años de prisión, por asesinar y ocultar a 6 de sus bebés en el sótano de su apartamento.
Fueron los nuevos inquilinos de esta vivienda los que arreglando el jardín desenterraron varios huesos. Alertaron a la policía que ante el hallazgo detuvo a los antiguos propietarios: un matrimonio de unos 40 años de edad.
La mujer ha confesado haber matado a sus hijos nada más nacer: fruto de embarazados no deseados desde 1988.
Los había asfixiado, metido en bolsas de plástico y después enterrado: algunos en el jardín de su propia vivienda y otros en el de la casa de sus padres a tan solo un kilómetro de distancia.
La policia ha recuperado de los dos lugares ocho cuerpos. Pero creen que todavía podría haber más.
Los vecinos de esta tranquila localidad del norte de Francia a unos 40 kilómetros de Lille no sospechaban nada.
Como afirman los vecinos, “es terrible. No entiendo nada. Estoy en shock”. Otro de los residentes no termina de creérselo “es tan macabro. Yo pensaba que vivía en un vecindario pacífico”.
La presunta infanticida ha asegurado que lo hizo para ocultar la existencia de los bebés a su marido. Su marido ha sido exculpado y puesto en libertad.