El alcalde de Mariúpol denuncia el hallazgo de una fosa con hasta 9.000 cadáveres

En el día 58 de la guerra en Ucrania, el alcalde de la ciudad portuaria de Mariúpol, Vadym Boychenko, ha denunciado un desolador y terrorífico descubrimiento. En una de las fosas descubiertas en las últimas horas por las imágenes satelitales ofrecidas por la empresa tecnológica Maxar, han podido ser enterrados entre 3.000 y 9.000 cadáveres. Asegura que se trata del "mayor crimen de guerra del siglo XXI".

La ciudad al sur de Ucrania ha sido tomada por las Fuerzas Armadas rusas, según informó el Kremlin el jueves. Ahora, Boychenko afirma que "en las fotos por Maxar el 9 de abril, el sector de la fosa común en Mangush (en Mariúpol) es 20 veces más grande" que la de Bucha. Denuncia que los soldados rusos trataron de esconder los cuerpos para ocultar sus crímenes.

"Cavaron nuevas trincheras y las llenaron de cadáveres a diario durante todo el mes de abril. Nuestras fuentes informan que en tales tumbas los cuerpos se colocan en varias capas", ha detallado tajantemente el edil. "Están cavando agujeros de 30 metros y trayendo los cuerpos de nuestros residentes de Mariúpol en camiones", añade. Ha calificado al presidente ruso, Vladímir Putin como "el nuevo Babyn Yar". "Hitler luego mató a judíos, gitanos romaníes y eslavos. Y ahora Putin está destruyendo a los ucranianos", ha exclamado.

Acusa a Rusia de matar a decenas de miles de civiles en Mariúpol

Boychenko ha aseverado que Vladímir Putin "ya ha matado a decenas de miles de civiles en Mariúpol. Y esto reclama una fuerte reacción de todo el mundo civilizado. Algo tiene que detener el genocidio ". La empresa Maxar dijo que sus fotos mostraban más de 200 fosas comunes en la asediada localidad. "Lamentablemente, vimos que los cuerpos de los residentes muertos de Mariupol comenzaron a desaparecer de las calles de nuestra ciudad", explicó el alcalde.

Mariúpol sufre el mayor horror de la invasión rusa de Ucrania. Sus cimientos han sido soterrados, más de 100.000 civiles de su población siguen atrapados en la ciudad, y, miles de ellos se encuentran refugiados en la rodeada y bloqueada planta metalúrgica de Azovstal. Desde Kiev niegan la toma de control rusa y aseguran que la resistencia sigue luchando. El presidente ucraniano,Volodímir Zelenski, ha asegurado que "los ocupantes continúan haciendo todo lo posible para tener una razón para hablar de al menos algún tipo de victoria".

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