Fuentes del Gobierno español han hecho este anuncio al concluir la última reunión que ha mantenido en Pekín el jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, con las mayores instituciones financieras chinas, que han mostrado su interés en las cajas de ahorros.
Después de que ayer el primer ministro chino, Wen Jiabao, se comprometiera a seguir comprando deuda española y a invertir en la reestructuración de las cajas, Zapatero se reunió con representantes del fondo soberano de inversión; el Banco Popular de China (banco central) y el Bank of China, cuarta entidad del país.
Han acudido también a la cita en la Embajada española el China Citic Bank, el octavo banco más grande por gestión de activos, de los que el BBVA posee un 15 por ciento; la Comisión Reguladora Bancaria; y la Administración Estatal de Divisas.
La capacidad inversora de estas instituciones, según las fuentes del Ejecutivo español, asciende a más de 3,5 billones de dólares, más de tres veces el PIB español. Zapatero les ha presentado su política de reformas y ha considerado que ha quedado atrás la posibilidad de un contagio de la crisis de la deuda soberana que ha afectado a varios países del euro.
El vicepresidente de la Comisión Reguladora Bancaria, Zhou Mubing, ha señalado que China sigue con mucho interés la evolución del sector financiero español y, como ejemplo, ha destacado que ayer se aprobó la constitución de una empresa mixta entre el Santander y el China Construction Bank con permiso para abrir doscientos bancos en el ámbito rural.
Por su parte, el vicepresidente de la CIC, Xie Ping, ha reconocido que ya han inspeccionado el sector financiero, que han hablado con dos grandes bancos y que estudian cómo intervenir en las cajas. Según han apuntado las fuentes, la corporación ha hecho pública su disponibilidad para invertir más de 9.000 millones de euros en el sector financiero español, la mayoría a través de fondos públicos.
Jin Qi, consejera del gobernador del Banco Popular de China, ha destacado asimismo la compra de bonos españoles por parte de este banco central y ha garantizado que seguirá apoyando a España. También ha ratificado su confianza en el país el subdirector de la Administración Estatal de Divisas (SAFE), Huang Guo Bo, quien se mostró optimista ante las perspectivas de la economía española.
Por su parte, el presidente del Banco de China, Xiao Gang, ha mostrado su interés por entrar en el mercado español de banca minorista al recordar que ya tienen sucursales en diez países europeos. Zapatero ha vuelto a agradecer la confianza que China ha depositado en España durante la crisis, una actitud que "ha sido un factor importante ante los mercados para generar estabilidad".
La garantía de que seguirán comprando bonos y que invertirán en las cajas son "dos compromisos valiosos que van a contribuir a la confianza, la estabilización, las reformas y a la recuperación de nuestra economía", ha insistido en rueda de prensa.
Ha animado además a los inversores a participar en la privatización del 49 por ciento de AENA, en los concursos para la gestión privada de los aeropuertos de Barajas y el Prat y en el plan de colaboración entre el sector público y privado de infraestructuras.
Desde el Gobierno español se destaca la paradoja de que las empresas españolas, como el Grupo Mondragón, Nutrexpa o Alsa, han invertido más en China que el gigante asiático en España, una relación a la que se quiere dar la vuelta.
Zapatero ha subrayado la apuesta española por China desde el convencimiento de que es necesario asegurarse una posición privilegiada en un país que ha experimentado en las últimas tres décadas un crecimiento anual del 10 por ciento, sin parangón en la historia. "España está muy bien posicionada en China y esto es un gran estímulo para nuestras empresas y un gran potencial para la inversión que necesitamos", ha subrayado Zapatero para defender su "diplomacia diplomática".