Consumo
Un productor de sandía, sobre la subida de los precios: "Esto es una bomba de relojería y lo paga el consumidor"
El melón y la sandía, las frutas del verano por excelencia, experimentan una temporada más de subida de precios que se ha visto incrementada por las lluvias del mes de mayo. Pepe Barea, productor de sandía, explica la crisis que atraviesa el sector.
El melón y la sandía son más caros porque escasean. Las lluvias y el granizo de mayo han acabado con el 65% de la producción y a menos producto más subida de los precios
En los mercados de abastos notan que cuando llegan a los puestos tanto el melón como la sandía son más caros. Se han unido muchos factores, otros años la sandía ha ido muy barata en el campo pagándose a 10 céntimos, pero ahora las inclemencias del tiempo han hecho que haya menos producto. La sandía está de media un euro más caras el kilo que la temporada estival anterior.
"Los costes de producción son mas del doble de lo que te pagan y al final dejas de producir"
Pepe Varea es productor de sandía. Levantó gran parte de sus campos porque no le salían los números. Si produces sandías y te pagan 8,10 ó 12 céntimos por kilo y los costes de producción son más del doble dejas de producir: "el año pasado ya fue un referente en el tema de los precios", señala.
Destaca el productor que si a esta circunstancia unimos las inclemencias meteorológicas esto es una bomba de relojería y "el que lo paga es el consumidor". Apunta este productor que desde Senegal entran sandías en febrero y marzo y "al final la globalización hace que la gente quiera comer fruta durante todo el año y cuando llega el verano también baje el consumo porque la gente está cansada de comerla".
Desconoce en qué punto de la cadena de consumo se disparan los precios. Señala que el primer eslabón es el agricultor y el último es el consumidor "que la paga a precio de oro". No sabe donde están esos costes que incrementan al final de la cadena y quién se los queda.