Informaciones de Víctor Serrano
Las palabras del hermano mayor detenido por matar a su madre en Castro Urdiales: "Decía que prefería estar en cualquier sitio antes que en casa"
Espejo Público habla con el juez de menores Emilio Calatayud sobre la detención de dos hermanos por el presunto crimen de su madre en Castro Urdiales (Cantabria).
Publicidad
La localidad de Castro Urdiales (Cantabria) se encuentra conmocionada por la detención de dos hermanos, de 13 y 15 años, por presuntamente matar a su madre. Tal y como ha trascendido de la investigación el crimen se habría producido cuando los niños llegaron a casa y mantuvieron una conversación acerca de las malas notas del mayor. A partir de ahí se desencadenó una discusión que terminó con esta agresión. El mayor de los hermanos le habría dado una puñalada en el cuello a su progenitora, de 48 años, terminando con su vida. Después de esta primera agresión le habría asestado hasta 20 cuchilladas por todo el cuerpo.
Fue una llamada telefónica con su abuela la que puso en alerta a los investigadores. Los menores decían que les habían secuestrado. Esto activó la llamada 'operación jaula' para dar con los hermanos y localizar a la familia. Finalmente ambos fueron localizados y detenidos como presuntos autores de los hechos.
El periodista Víctor Serrano apunta que según el entorno de los menores no habían dicho que les pegaran en casa aunque sí les habían visto moratones en el cuerpo. Mantiene este periodista que los compañeros del hermano mayor le describen como un niño estudioso que no había tenido problemas hasta este curso que empezó a suspender varias asignaturas.
Añade el comunicador que el hermano mayor estaba visitando a la orientadora y un compañero ha manifestado que vio que tenía la tarjeta de una psicóloga. "Le dijo que preferiría estar en cualquier parte antes que en su casa. No era violento aunque sí algo raro, era el único de ellos que no tenía WhatsApp", mantiene.
"El padre tendrá la patria potestad sobre el pequeño de los hermanos pero habrá que ver si está en condiciones de estar con la familia"
El juez de menores Emilio Calatayud apunta que "los niños son niños y a veces se producen estos acontecimientos". "Pobre chaval, el de 13 años tiene que estar en un centro de protección de menores por la vía de servicios sociales. Se le ha internado 6 meses prorrogables por otros 3 meses. Dentro de 9 tiene que estar el juicio celebrado. El padre es víctima y responsable civil de los hechos que hacen sus hijos, un drama", apunta.
A lo largo de su trayectoria profesional el juez ha tenido casos de hijos que han matado a su madre, a su suegra o a su hermano. "Sucede, gracias a Dios poco, pero de vez en cuando sucede", lamenta.
El futuro legal del menor del 13 años
Cree el magistrado que con mucho trabajo de profesionales por delante los menores pueden tener un buen futuro. "En función de la evolución el mayor podría pasar a prisión con 16 años, estará un tiempo en internamiento cerrado con tratamiento adecuado y luego ya vendrá la época de libertad vigilada".
En cuanto al hermano de 13 años, señala que tiene que estar supervisado por los servicios sociales y después el padre seguirá teniendo la patria potestad sobre él y habrá que ver si está en condiciones de volver con la familia o el padre puede renunciar a la patria potestad. Cree que donde mejor está el pequeño de los dos hermanos ahora mismo es fuera del ambiente familiar y asesorado por los servicios sociales.
Más Noticias
- Del 'francosfera' de Ayuso a los despistes de Sánchez y alguna canción: Vuelve 'El Apunte'
- Verónica consigue desalojar de su casa a un inquiokupa: "Me ha destrozado la casa"
- Indignación tras el archivo del caso de las gemelas que intentaron suicidarse juntas: "Le quitaron las ganas de vivir hasta preferir saltar"
"No sabemos lo que puede pasar dentro de una familia"
Sobre las motivaciones de los menores para lleva a cabo el crimen señala que "lo que pasa de puertas para adentro con una familia no lo sabemos". La ventaja es que aquí no se les pone una prisión permanente de por vida como sí pasaría en EEUU, mantiene. "Aquí el más pequeño tiene la seguridad jurídica de que se le va a juzgar como un menor y eso es una garantía. La justicia del menor tiene que ser tuerta pero no ciega, juzgamos a los menores pero tenemos que saber ver la justicia de cada uno".
Publicidad