Mercedes, hija de una víctima mortal del volcán de Teneguía: "Mi padre murió por comer unas uvas con ceniza"

Mercedes conoce en primera persona las consecuencias devastadoras que puede tener la erupción de un volcán. En su caso, el volcán de Teneguía que erupcionó en La Palma (Canarias) en 1971 la dejó huérfana de padre.

Cuenta esta profesora del instituto de las Greñas en La Palma que su padre era aficionado al cine y la fotografía y se acercó con unos amigos para grabar aquella erupción. Esa tarde comieron uvas que estaban contaminadas por los gases del volcán. A su padre le sentaron mal y le provocaron una peritonitis por la que terminó falleciendo. El intestino se le llenó de líquido y no le pudieron salvar.

"Fue un hecho desgarrador para mi madre. Todo ocurrió en menos de una semana", lamenta. Cree que el desenlace fatal fue a causa de que en aquella época no había medidas de seguridad.

Hoy ella vive como tantos palmeros las consecuencias de la erupción del volcán de Cumbre Vieja. Trabaja en un instituto donde tratan de cumplir el protocolo Covid, un protocolo que choca con las indicaciones que se aportan para evitar el riesgo de inhalar cenizas, ya que se aconsejan cerrar las ventanas.

Reconoce que en la zona este, donde ella se encuentra, no lo tienen tan difícil pero los alumnos están asustados y preocupados. Intentan llevar a cabo terapias para que exterioricen ese dolor de algo que no entiende.

Puedes ver la entrevista completa a la hija de una víctima mortal del volcán de Teneguía en Espejo Público a través de Atresplayer.

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