Con material inédito como fotografías exclusivas de la Clínica San Ramón de Madrid donde se puede ver, en una de ellas, el cuerpo de un bebé que tenían en un congelador y el testimonio de una de las enfermeras que nos cuenta que ese bebé estaba ahí para que las madres que se les decía que sus hijos habían fallecido y querían ver a su hijo se les enseñaba ese cadáver.
El Doctor Vela director de la clínica en aquella época se ocupaba de todo y controlaba al personal de limpieza, al de mantenimiento, a las enfermeras y hasta el taxista que se encargaba de transportar a los bebés.
Las parejas que querían adoptar se ponían en contacto con la monja Sor María en primer lugar aunque el verdadero responsable de esto era el doctor Eduardo Vela que asegura que ha quemado todos los archivos e historiales de aquella época.
Además también contamos con el testimonio de Inés, una madre que afirma que el doctor Vela le regaló un bebé.