Pilar Marcos, de 64 años, fue acusada de matar a su marido en noviembre de 2009, de una cuchillada en el pulmón. En el juicio, la mujer alegó que su marido, José Antonio Gil, de 77 años, se había caído encima del cuchillo en el trascurso de una pelea.
Era el fin de 45 años de malos tratos físicos y psicológicos, que sus hijos ratificaron durante el juicio.
La Fiscalía pedía para ella 11 años de prisión mientras que la defensa solicitaba la libre absolución, fue un jurado popular quien juzgó a Pilar Marcos, y 6 de los 9 miembros del mismo la consideraron no culpable.
La alegría que mostraba al conocer el veredicto del jurado le ha durado poco, la Fiscalía recurrió la absolución alegando contradicciones en la decisión del jurado popular. Ahora, el Tribunal Superior de Justicia de Navarra acaba de estimar este recurso y ordena repetir el juicio.
Será de nuevo con un jurado popular, esta resolución, sin embargo, aún no es firme porque la defensa de Pilar Marcos puede recurrirla.
Pilar Marcos comentaba telefónicamente a Antena3 que este tema no acabará hasta que no consigan una condena contra ella y que esto no es más que prolongar su agonía.