No se sabe nada de ella desde la madrugada del domingo después de una cena de trabajo en la que coincidió con su ex pareja. La Guardia Civil rastró ayer un polígono industrial cercano a Boadilla y hoy, tras encontrar el cadáver del sospechoso en San Lorenzo del Escorial, las pistas les ha llevado a Fuenlabrada.
Un gran dispositivo de la Guardia Civil rastrea una zona de descampado entre Fuenlabrada y Leganés desde la que se tiene constancia que se envió el mensaje desde el móvil de María a una amiga en el que le decía: "Ya estoy en casa". Además a lo largo del día de hoy se registrará en Móstoles el lugar en el que Javier Sánchez podría haber pasado algunas horas desde la desaparición de María. Otro de los lugares en el que se detectó la señal del móvil es una población de la zona del Noroeste de Madrid y también allí se está llevando a cabo la investigación.
La Guardia Civil también buscaba al ex novio que era sospechoso y el único que podía aportar datos sobre el paradero de María. La aparición del cuerpo sin vida del ex novio colgando de una torre de alta tensión dificulta ahora la búsqueda de María García.
Registro del vehículo
Los agentes ya han analizado también el vehículo del fallecido en el que sufrió un accidente. Se han encontrado restos biológicos de la mujer pero no hay sangre ni nada determinante como para sospechar que pudo trasladar en él su cadáver. Lo que si se ha encontrado es un par de botas que al parecer se confirma que pertenecen a la joven desaparecida y que tal vez podrían ser las que llevaba puestas la noche del sábado al domingo.
