Energía

Rusia ya es el segundo proveedor de gas de España, al que compramos una cuarta parte del suministro

Estados Unidos es el socio preferencial de España para la compra de gas. Rusia ya asciende al segundo lugar, por encima de Argelia, y le compramos casi un 25 % del total del suministro.

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Gran parte de la Unión Europea ha cerrado filas en torno a su intento de reducir la dependencia energética de Rusia, la cual ya ha amenazado en reiteradas ocasiones con cortar el flujo de gas a determinados países. Los hay como Alemania, que ya están aplicando medidas de ahorro y así conseguir que esa autosuficiencia sea mayor, a la espera de buscar nuevas alianzas que le permitan disponer de la cantidad de gas que le era anteriormente suministrada por Rusia.

Sin embargo, esa unanimidad a nivel europeo no está en todos los países. Naciones como Hungría, Bulgaria o Polonia han tratado de aplacar todas las sanciones contra Rusia, al tener una dependencia absoluta del gas procedente de Moscú. Y luego está el caso de España, que, en su intento por reducir la dependencia gasística de Argelia, ya tiene a Rusia como su segundo proveedor de gas, al que adquirimos una cuarta parte del total que llega a nuestro país.

Concretamente, a Rusia le compramos un 24,4 % del total del gas, mientras a Argelia, que hace relativamente poco era una de las fuentes principales para obtenerlo, ha caído a la tercera posición, adquiriendo de dicho país un 21,6 %. A la cabeza está Estados Unidos, socio preferencial de España en la compra de gas, que nos suministra el 29,6 % del total, cinco puntos más que el total suministrado por Rusia y ocho por encima de Argelia.

El plan de ahorro energético divide a las comunidades

Aunque el plan de ahorro energético impulsado por España lleva una semana en vigor, la división a nivel autonómico no ha parado de crecer. La Comunidad de Madrid ya ha anunciado que lo llevará ante el Tribunal Constitucional, y tanto País Vasco como Cataluña lo están aplicando a regañadientes, aunque tampoco descartan solicitar medidas cautelares, sobre todo en el caso del primero, que ha generado una fuerte división dentro del gobierno vasco.

La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha indicado que la demanda eléctrica ha caído un 3,9 % desde que la semana pasada empezaron a aplicarse las medidas de ahorro energético aprobados por el Ejecutivo. La Unión Europea ha felicitado a España por sus medidas, asegurando que "contribuyen" enormemente a los planes de bloque comunitario para conseguir reducir el consumo.

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