Capítulo 381
La Guardia Civil confirma a Marta y Pelayo que Santiago ha desaparecido sin dejar rastro
Pelayo y Marta disimulan ante los agentes, pero temen que se descubra el cuerpo en propiedad de Marta.
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El sargento de la Guardia Civil ha visitado a Pelayo y Marta para informarles de que no hay ni una sola pista sobre Santiago. La investigación no avanza y los agentes se enfrentan a un caso sin testigos ni movimientos.
“Es como si se hubiese desvanecido”, ha declarado el sargento con inquietud.
Aunque por fuera mantienen la compostura, por dentro Marta y Pelayo están en tensión: saben que Santiago está muerto y temen que la policía acabe descubriéndolo. Su preocupación no es por su paradero, sino por la posibilidad de que la verdad salga a la luz antes de tiempo.
La incertidumbre crece, y con ella el miedo a que la Guardia Civil empiece a sospechar que detrás de la desaparición se esconde algo mucho más grave.
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