Habla el mejor amigo de la educadora social asesinada: "Ella me contó que tenía casos muy fuertes, no sé cómo podía estar sola"

El pasado domingo, Belén era asesinada en Castuera (Badajoz). La joven trabajaba como educadora social en un piso tutelado y murió a manos de tres de los cuatro menores con los que vivía.

La policía la encontró con signos de asfixia y golpes, poco antes de detener a los tres presuntos responsables que intentaban huir. Estos contaban con antecedentes y los compañeros de Belén ya temían que algo así pudiera ocurrir.

En Espejo Público, el padre de uno de los menores ha hablado. Según nos ha contado Carlos Quílez, este ha declarado que el amigo de su hijo, junto con su madre, estaban suministrándole drogas y que su hijo necesitaba ayuda.

"Uno de los menores había consumido marihuana y cocaína", advierte Quílez. Este dato evidencia que la ingesta de drogas es compatible con la paliza que le propinaron a Belén antes de ahogarla.

La víctima de este asesinato cruel era una buena persona que tenía muchos amigos. Entre ellos, quizá uno de los más destrozados ahora mismo sea Godoy. "No sé qué hace un chaval que ha estado delinquiendo una semana en una casa con una chica sola", señala.

Sus compañeros de gremio y sus amigos lloran su pérdida y lamentan la falta de protección que tienen los trabajadores sociales. Juntos, reclaman una ley que proteja a los trabajadores de menores conflictivos.