¿Lo lograrán?
El reto casi imposible con el que sorprende Marron: con cuatro platos de dj y un circuito infernal
La perfecta sincronización de los vinilos con la canción base permite que las pelotas liberadas por el servomotor reboten hasta alcanzar la canasta.
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Vuelve el DJ Rebotitos con un nuevo reto aún más difícil.
Al igual que en el reto anterior, una música empezará a sonar, en este caso el 'Can’t touch this'.
En cuanto empiece a sonar la música, Galvez tendrá 10 segundos para mezclar 4 bases más de música electrónica antes de que la pelota caiga de la rampa.
Al caer, la pelota deberá rebotar en cada una de las plataformas que están girando encima de cada vinilo. Esto solo sucederá si todas las canciones están perfectamente mezcladas.
Por último, si la pelota es capaz de rebotar con éxito por dos de las primeras plataformas, se meterá por un tubo que al caer en él activará un coche de tipo hotwheel. Este coche quitará la tela de una de las anillas por las que deberá pasar la pelota para encestar para decidir si el reto es un éxito o un fracaso.
Como de costumbre, el reto comenzará con Carlos juntando dos cables pelados.
La pelota está sujeta a la rampa con un servo, que al activarse la dejará caer. Una vez se active el servo comenzará la canción y Gálvez sincronizará las bases con esta.
Tanto los servos como el sensor, como el kabuki, están controlados por dos microcontroladores independientes.
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