Ucrania

El momento en que la familia que huyó en coche desde Ucrania llega a España: "Tendremos que ir a ver a la Virgen del Pilar"

Después de tres días de viaje y casi 3.500 kilómetros, Arturo Rambla, su mujer y sus dos hijos ya están en Zaragoza.

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"Hemos metido todo lo que hemos podido en el coche y ya estamos saliendo de Kiev". Así comenzaba el relato de Arturo Rambla, empresario español afincando en Ucrania desde hace 22 años. Tras la recomendación de Exteriores de abandonar el país y la creciente tensión en la zona, el lunes decidió poner rumbo a España con su familia. Después de un largo viaje por carretera, anoche llegaron por fin a Zaragoza, la ciudad de Arturo y donde vivirán un tiempo con su madre.

No fue una decisión fácil, pero lo han hecho convencidos y en busca de la tranquilidad que allí ahora mismo no tenían. "No es lo mismo verlo que tener que hacer las maletas tú", nos cuenta Arturo, "es realmente complejo y es difícil ponerte en la piel del otro y saber lo que se siente, lo que se sufre, sabiendo que estás dejando allí todo y con la incertidumbre de si vas a volver o no".

Su reacción al llegar a territorio español

Nada más pasar la frontera con Francia, Arturo decía emocionado: "la primera bandera española, sí señor, aquí estamos". Al momento, en el vídeo, se escucha a su mujer Natalia decir "Hola, España". Colgando del retrovisor, narra en la misma grabación, está "la Virgen del Pilar, que nos ha acompañado todo el viaje, habrá que ir a hacerle una visita".

Han recorrido casi 3.500 kilómetros y han tardado tres días en llegar. Al viajar con sus dos hijos, de 10 y 2 años, han tenido que ir haciendo muchas paradas para que fuera más llevadero. "Queríamos hacer un poquitín más de viaje pero con los pequeños no es fácil", nos dice Arturo, "se cansan, a veces se marean, vomitan... entonces es todo un espectáculo".

Con esperanzas de regresar

No saben cuánto tiempo permanecerán en España, pero esperan poder regresar a Ucrania donde han dejado su casa, familiares, amigos y la empresa de Arturo, que se dedica a importar y distribuir productos de alimentación. "Mucha tristeza porque hemos dejado media vida allí", asegura, "yo tengo la esperanza del 99% de que vamos a regresar, pero ese 1% cuando te toca a ti, ese 1% es muy grande".

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