Publicidad

EN LA ESTACIÓN DE ATOCHA

El joven agredido por dos guardias de seguridad de Renfe: "Más de uno me tenía enganchado del cuello, otro me pisó el pie"

Jesús Ndong, la víctima de la agresión, que también es vigilante de seguridad, denuncia un abuso de autoridad. Ahora está pendiente de un parte de lesiones para denunciar las agresiones.

Una pareja de vigilantes de Renfe pidió el billete a un hombre negro que se encontraba en el vagón, sin que antes se lo pidieran a ningún otro. Tras una disputa y un forcejeo, finalmente el joven fue desalojado por otros miembros de seguridad, que lo redujeron en el suelo de la estación.

"En ningún momento tiene que ponerme la mano encima porque me estoy negando a bajar del tren", ha señalado Jesús Ndong, la víctima de la agresión. Cuenta que el vigilante activó "la alarma de una forma muy violenta" y que le exigió que se bajase del tren "por las buenas o por las malas".

Tras ser desalojado a la fuerza del tren, Jesús confiesa que se puso muy "nervioso". "Solté el patinete y empezamos a forcejear. Nos caímos al suelo. Más de uno me tenía enganchado del cuello, otro me pisó el pie", relata el joven.

"Yo no lo puedo calificar como racismo", ha afirmado, aunque considera que, como agente de seguridad, "no es la forma de proceder". Ahora está pendiente de un parte de lesiones para denunciar las agresiones.

Renfe, por su parte, ha negado que sus vigilantes de seguridad actuasen por razones racistas o xenófobas cuando sacaron de un vagón a la fuerza a un hombre negro en la estación de Atocha (Madrid) y ha indicado que la intervención se produjo porque el viajero "estaba perjudicando al resto del pasaje".

Tras la denuncia presentada esta mañana por la Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado ante el Defensor del Pueblo, la compañía ha negado en un comunicado que se trate de una agresión racista.

Renfe afirma que el desalojo se produjo porque este pasajero "se encontraba en el interior de un tren dificultando la entrada y salida de otros viajeros que, desde el propio andén, se dirigieron al personal de Renfe para quejarse de la situación".

Publicidad