Estetoscopio al lado de un informe médico

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SEGÚN LA DIRECCIÓN GENERAL DE SALUD PÚBLICA

Detectan 38 afectados por un brote de hepatitis A en un restaurante de Palma

Aunque se cree que el brote ya está controlado, no se descarta que aparezca algún caso más.

La directora general de Salud Pública de Baleares, Maria Ramos, ha informado de que se han contabilizado 38 infectados en el brote de hepatitis A detectado en un restaurante de Palma entre finales del año pasado y los primeros días de enero, que motivó su cierre durante 10 días, si bien ya ha reabierto.

Ramos ha precisado en una rueda de prensa que 5 de los 38 casos son terciarios, ya que corresponden a contagiados a partir de otra persona que a su vez se había contagiado del caso primario (la persona manipuladora de alimentos que se piensa que dio comienzo al brote). Cinco son extrabajadores del restaurante. Ha recordado que la hepatitis A es una enfermedad vírica no severa ni grave, que se cura en 2 o 3 semanas. Se transmite por vía oral-fecal y en este caso fue a través de manos, boca y alimentos.

Dado que el período de incubación de esta enfermedad es largo (de 50 a 60 días), el brote no se ha dado por cerrado todavía porque "pueden continuar apareciendo casos, que probablemente sean terciarios", ha indicado Ramos, que ha recordado que todos los casos secundarios detectados se contagiaron en noviembre.

Ramos ha recalcado que si el restaurante está abierto es "porque desde el punto de vista de Salud Pública no tiene ningún riesgo". Ha recordado que el brote se detectó a mediados de diciembre, cuando un médico de un centro de salud comunicó al Servicio de Epidemiología que había dos personas con hepatitis A que habían comido en un mismo restaurante. Se investigó si había otros casos declarados y se detectó el de un ayudante de cocina del establecimiento.

El 19 de diciembre, una inspectora del Servicio de Seguridad Alimentaria acudió al establecimiento, detectó que el trabajador estaba de baja (y ya no era infectivo), algunas deficiencias de higiene, de infraestructuras y de falta de formación del personal en manipulación de alimentos. Todas ellas se consideraron moderadas, ha dicho Ramos. Ante tres opciones posibles (pedir que se enmienden las deficiencias, suspensión provisional y que se enmienden en 10 días o bien cierre), la inspectora optó por el intermedio. Además, los días 27 y 28 se activaron alertas en la red sanitaria y se reforzaron las medidas de prevención.

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