Se conocen más detalles de la matanza de 72 inmigrantes latinoamericanos en México gracias al único superviviente, un joven ecuatoriano de 18 años que esperaba llegar sin documentos hasta Estados Unidos.
De él depende una familia de 12 personas, incluida su mujer, que está embarazada. Él tiene 18 años y toda su familia depende de él. Cuentan que dejó la aldea porque sus padres que viven ilegalmente en EEUU le pidieron ayuda.
No pueden pagar la deuda que tienen con los traficantes que les ayudaron a entrar al país. Freddy tuvo que cruzar medio continente y cuando estaba a punto de llegar a su destino, se cruzó con los 'Zetas'.
Una organización criminal que controla el tráfico de indocumentados en el norte de México. A Freddy y a otras 72 personas en su misma situación les pidieron dinero. Como se negaron, acabaron disparando contra ellos. El joven ecuatoriano recibió una herida en el cuello.
Se salvó porque se hizo el muerto y permaneció inmovil durante horas entre cadáveres. Gracias a él sabemos lo que pasó. Su familia dice estar pasando los peores momentos de su vida.
Su hermano le advertía sobre el peligro que corría. La Comisión Nacional de Derechos Humanos le ha puesto cifra a este drama, hasta 20.000 inmigrantes son secuetrados cada año por los narcos. Las Organizaciones humanitarias dicen que son casos que ni siquiera se investigan.