Ha sido encontrada una fosa común cerca del campo de concentración de Bergen-Belsen, donde estuvo retenida Anna Frank.
La fosa común, situada en lo que hoy es un parque al final de un antiguo camino que llevaba hasta el campamento nazi, fue localizado con ayuda de varios supervivientes del Holocausto. Se cree que contiene los restos de la adolescente que escribió uno de los libros más leídos sobre la barbarie nazi, y que murió en este campo de concentración después de que su familia fuera capturada y encerrada allí.
El cuerpo de Anna nunca fue encontrado
Anna murió en Bergen-Belsen a los 15 años, así como su hermana Margot y Jan Verschure, uno de los miembros que vivía con ella. El nieto del señor Verschuere, Paul, ha sido quien ha conducido hasta esta fosa después de una exhaustiva investigación junto a varios supervivientes del campo donde estuvo su abuelo. Su testimonio ha sido clave.
Paul asegura que uno de los supervivientes le dio "un mapa en el que marcó donde fue enterrado su abuelo".
Entre 1941 y 1945 más de 70.000 personas murieron en Bergen-Belsen, al norte de Alemania, donde otros cientos de judíos fueron sometidos a torturas y a trabajos forzosos. Las enfermedades eran abundantes y Anna, que escribió en su diario todas sus vivencias, murió de tifus durante un brote en 1945.
Su cuerpo nunca fue encontrado y se asumió que había sido arrojado a una fosa común junto a otras cientos de víctimas.
Jens-Christian Wagner, director del memorial de Bergen-Belson, dijo que está esperando la respuesta de la comunidad judía para poder exhumar los restos, ya que la ley judía no permite hacerlo. Por el momento todo el lugar se ha declarado un cementerio.