La advertencia de Sánchez a Putin: "Las sanciones perdurarán hasta que dure el último soldado ruso en suelo ucraniano"

365 días de guerra entre Rusia y Ucrania, la población invadida despierta cada mañana con temor a que Moscú lance un gran ataque con motivo de este aniversario y esta semana se vive como crucial en medio del conflicto. Precisamente en Kyiv han coincidido el presidente Pedro Sánchez que se ha reunido con su homólogo Zelenski y Susanna Griso que ha viajado a la capital ucraniana para relatarnos desde el terreno como se viven estos momentos.

Pedro Sánchez y Volodimir Zelenski dieron una rueda de prensa conjunta en la que era palpable el entendimiento de ambos países, después el presidente español se trasladó al Parlamento Ucraniano para dar un discurso de 10 minutos, un honor que pocos mandatarios han tenido. Ha sido tras este discurso cuando Susanna Griso ha podido entrevistar a Sánchez en una embajada española con las ventanas cubiertas de sacos para prevenir que se rompan los cristales en caso de impacto.

Ha sido una entrevista de 10 minutos, en el despacho del embajador y con un presidente todavía emocionado por lo vivido en el parlamento ucraniano como él mismo le confesó a Griso 'of the record'. Ya con las cámaras grabando y los micrófonos abiertos, Sánchez se expresó de la siguiente forma: "Creo que es un orgullo para la sociedad española, que con todo el esfuerzo en ayuda humanitaria, cooperación militar, también ayuda económica para la reconstrucción y acogida de refugiados, incluso estando tan lejos somos el quinto país en acogida, el que el presidente Zelenski haya tenido esta deferencia con la sociedad española y que también la haya tenido el parlamento ucraniano".

Para el mandatario español estos gestos por parte de Ucrania se interpretan como un reconocimiento a la solidaridad del pueblo español. "Ver la bandera de España junto con la bandera de Europa y la de Ucrania en el parlamento nacional, sin duda alguna es el reconocimiento de una labor de solidaridad y un deber moral que tiene la sociedad española con un pueblo que está siendo agredido y ante un agresor que lo único que entiende, por lo que parece de sus intervenciones, es el lenguaje de la guerra y el de la agresión" ha aseverado Sánchez.

España enviará6 tanques Leopard en las próximas semanas y Sánchez se ha comprometido a elevar ese envío a 10, algo que a priori no ha gustado a sus socios de Gobierno. Sin embargo, no ha querido el presidente echar leña al fuego y se ha limitado a explicar que son "diferencias de matices". "Más allá de los matices es evidente que todos los ministros y ministras estamos a favor de la paz, de la integridad territorial, de ayudar y apoyar al pueblo que esta siendo agredido . A partir de ahí es cierto que hay matices e intensidades de esa cooperación que pueden diferir pero el compromiso está".

De forma distinta interpreta las críticas lanzadas por el jefe de la oposición que le ha echado en cara a Moncloa que España compre tanto gas a Rusia y lo acusa en cierta forma de estar financiando la guerra de Putin. "La crítica que hace el PP no está justificada, en primer lugar porque mucho de ese gas que ha venido a España es para luego poder llevar a Francia y Portugal, pero a parte de eso si algo ha demostrado este gobierno es un compromiso coherente" ha contestado.

Sánchez hace una lectura positiva de queChina esté dispuesta a ser mediador para la paz: "A mí me parece decisivo que un actor global se involucre de una manera más directa para el cese de las hostilidades", pero expone que "esa paz tiene que ser justa para ser duradera y eso significa que se tiene que respetar la integridad territorial y creo que esto es importante decírselo a Putin, y también decirle a Putin que esas sanciones van a perdurar todo el tiempo que dure hasta el último soldado ruso en suelo ucraniano".

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