El Barcelona cayó ante el Athletic Club tras un espectacular golazo de Iñaki Williams en la prórroga de la final de la Supercopa de España. El Barça llegó a ir por delante en el marcador en dos ocasiones gracias al doblete de Antoine Griezmann, pero los leones no se rindieron nunca y terminaron levantando el título ante un Leo Messi completamente desaparecido en combate.
Messi no tuvo su noche. El argentino fue duda por unas molestias hasta el último momento y terminó entrando en el once titular, pero pasó la final prácticamente desapercibido. Tan solo participó en la jugada de uno de los tantos culés, pero sus estadísticas lo dicen todo: tocó 104 balones y perdió 21.
La impotencia de Messi mostró una cara que el argentino no acostumbra a enseñar, pero que empieza a ser frecuente por su descontento con el proyecto deportivo del Barcelona. Al final de la prórroga y viendo cómo el Athletic se llevaba el título, se le cruzaron los cables y agredió a Villalibre, uno de los protagonistas de la final.
El argentino impactó con su mano en el rostro del futbolista del Athletic y el colegiado, previa revisión en el VAR, le mostró la roja directa. La agresión le puede costar a Messi una sanción de dos partidos, en caso de que sea considerada falta leve, o de cuatro si el Comité de Competición la considera grave. lo que parece seguro es que Messi se perderá los próximos partidos del Barça ante el Cornellá y el Elche.
"Es una agresión clara", dijo Asier Villalibre tras el partido. El futbolista del Athletic fue protagonista de la final marcando un gol en el 89, recibiendo la agresión de Leo Messi y tocando la trompeta durante la celebración de los leones.
