Mundial Fútbol 2023

La Policía de Nueva Zelanda asegura que el tiroteo en Auckland no afectará a la organización del Mundial

Un tiroteo con tres muertos en Auckland (Nueva Zelanda) hace saltar las alarmas a horas del inicio del Mundial. "No tengo ninguna preocupación elevada por la FIFA. Es seguro asistir a los partidos", indica Andrew Coster, comisionado de la Policía de Nueva Zelanda.

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La Copa Mundial femenina de fútbol arranca este jueves y las alarmas se han encendido a horas del comienzo por un tiroteo en Auckland, que se saldó con tres muertos -entre ellos el atacante- y seis heridos. La Policía neozelandesa ha indicado que este incidente no afectará a la organización y desarrollo del Mundial. El tiroteo ha ocurrido cerca de las cuarteles generales de Estados Unidos y Nueva Zelanda.

"No tengo ninguna preocupación elevada por la FIFA: éste es un país que es generalmente seguro", informó el comisionado de la Policía de Nueva Zelanda, Andrew Coster, en una rueda de prensa desde Auckland retransmitida por la emisora pública Radio New Zealand.

"Es seguro asistir a los partidos", precisó Coster al analizar el ataque que se produjo en un lugar en construcción cerca de donde se aloja la selección de Noruega, que hoy se enfrenta a Nueva Zelanda en Auckland en el partido inaugural del Mundial femenino 2023.

La capitana de la selección noruega, Maren Mjelde, aseguró que ella y sus compañeras se sintieron "seguras todo el tiempo" porque la FIFA cuenta con un buen sistema de seguridad en el hotel.

"Todo el mundo parece tranquilo y nos estamos preparando con normalidad para el partido de esta noche. Luego puede que tengamos que adaptarnos si hay alguna instrucción de las autoridades", indicó Mjelde.

El tiroteo tuvo lugar a las 07:23 hora local en un sitio de construcción en la zona central de la ciudad de Auckland, la más poblada de Nueva Zelanda, cuando el atacante entró en un edificio y abrió fuego, según la Policía.

Las autoridades neozelandesas han confirmado la muerte de tres personas, incluido el asaltante, mientras otros seis resultaron heridos, tres de ellos de gravedad, por lo que no se descarta que se incremente el número de víctimas mortales.

El atacante es un hombre de 24 años, quien a pesar de haber sido condenado al arresto domiciliario, tenía un permiso para trabajar en ese sitio de construcción.

"Hay algunos indicadores de un historial de problemas mentales", precisó Coster, al agregar que se baraja la posibilidad de que el incidente esté conectado con un problema laboral. Tras el tiroteo, la FIFA expresó sus "profundas condolencias" por las víctimas.

El primer ministro de Nueva Zelanda, Chris Hipkins, aclaró en rueda de prensa que no se trata de una "amenaza a la seguridad de Nueva Zelanda" y que el Mundial "se desarrollará según lo previsto".

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