Dos trabajadores en las obras del estadio de Al Wakrah de Catar

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VARIAS ORGANIZACIONES DENUNCIAN LA EXPLOTACIÓN LABORAL DE LOS OBREROS

Muere un trabajador en las obras de un estadio de Mundial de Catar 2022

La organización de Catar 2022 ha comentado que se está llevando a cabo una investigación para determinar los factores que causaron la muerte de este trabajador. Amnistía Internacional ya alertó sobre la explotación laboral de los trabajadores inmigrantes que contribuyen a los preparativos del Mundial, mientras que la Confederación Holandesa de Sindicatos presentó una demanda contra la FIFA.

Un hombre que trabajaba en las obras del estadio de fútbol de Al Wakrah, que tiene previsto acoger los cuartos de final del Mundial de Catar 2022, ha muerto en un "accidente laboral", informó la organización del evento.

"Se está llevando a cabo una investigación para determinar los factores que causaron la muerte de uno de nuestros trabajadores", señaló en un comunicado el Comité Supremo para la Entrega y el Legado.

Es la primera vez que los organizadores del Mundial de 2022 anuncian la muerte de un trabajador relacionada con las obras de la Copa del Mundo. Sin embargo, en febrero, los organizadores afirmaron que seis trabajadores de los estadios del torneo habían sufrido accidentes laborales, pero que no se había producido ninguna muerte.

Además, el pasado mes de mayo se anunció una investigación relacionada con el fallecimiento de un trabajador de origen indio en el estadio de Al Bayt, aunque los organizadores negaron que su muerte tuviese que ver con las obras del estadio. La organización Amnistía Internacional alertó sobre la explotación laboral de los trabajadores inmigrantes que contribuyen a los preparativos del Mundial.

Asimismo, la Confederación Holandesa de Sindicatos presentó una demanda contra la FIFA por ser supuestamente cómplice en la explotación de un obrero de Bangladesh, sometido a "condiciones laborables inhumanas" en la construcción de estadios para Catar 2022.

Alrededor de 5.100 trabajadores del sudeste asiático -India, Bangladesh y Nepal- trabajan en las infraestructuras relacionadas con el Mundial, que según los organizadores costará 30.000 millones de dólares. Se estima que la cantidad de trabajadores ascienda a 36.000 para el año 2018.

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