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EN 'JULIA EN LA ONDA'

Pascual Maragall: "Soy un enfermo privilegiado"

Julia Otero ha entrevistado en su programa a Pascual Maragall y a su esposa, Diana Garrigosa, días después de la presentación en el festival de San Sebastián del documental 'Bicicleta, cuchara, manzana'.

Han presentado junto al realizador Carles Bosch, que también ha intervenido en la conversación, el documental 'Bicicleta, cuchara, manzana', que se estrena este viernes en España. En él, se describe el día a día del ex president de la Generalitat después del diagnóstico de la enfermedad y se intenta, a través de entrevistas con médicos expertos de distintos países, que se sepa más a cerca de ésta dolencia.

Diana asegura que en el momento en que recibieron la confirmación del diagnóstico de Pascual "estaba absolutamente convencida de que lo que le pasaba era que sufría de excesivo estrés", debido al momento tan difícil que estaba viviendo políticamente. Y de hecho, no fue hasta seis meses después del primer diagnóstico que lo anunciaran públicamente.

Pascual Maragall no se considera a sí mismo un buen ejemplo de enfermo. "Soy un enfermo privilegiado" dice. Cree que por su notoriedad y su situación familiar privilegiada ha tenido las cosas más fáciles. Su mujer, por su parte, afirma “yo tengo muy claro que siempre voy a estar a su lado, pero ni delante ni detrás, a su lado”.

En relación con su vida cotidiana, Pascual Maragall defiende, dentro de ciertos límites, la libertad de los pacientes pese a las restricciones impuestas por los médicos. Además, encuentra una diferencia fundamental en la repercusión que esta enfermedad tiene sobre pacientes que viven ingresados en una residencia y aquellos que, a pesar de pasar parte del tiempo en centros de día, no salen totalmente de su entorno.

Siendo los primeros quienes, a su modo de verlo, empeoran a una velocidad considerablemente mayor. Por esta razón recomienda que, siempre que sea posible, los pacientes no se separen de su entorno.

En la conversación también ha participado Carles Bosch, que ha afirmado que no tuvo dificultades a la hora de determinar lo que entraba o no en el documental: "Yo sabía perfectamente que lo que ellos no hubieran querido que pusiera yo tampoco lo habría querido poner".

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