Magia, ilusión y fantasía constituyen los ingredientes principales de Alicia en el país de las maravillas, un musical que el 16 de enero retorna a los escenarios madrileños en el Teatro Fígaro-Adolfo Marsillach.
"Estamos muy contentos, porque nos ha quedado redondo. Tenemos partes musicales y partes de texto, además de momentos interactivos en que los personajes bajarán al patio de butacas para jugar con el público", explicó el máximo responsable de la obra, Roberto Doctor.
Concebido para todas las edades, el espectáculo "sorprende del principio al final", ya que "Alicia descubre un personaje nuevo a cada momento, las canciones cada vez son más espectaculares y las situaciones ganan en comicidad hasta llegar al clímax de la representación", expuso el director.
La novela original de Lewis Carroll, "larga y densa" en palabras de Doctor, requería una adaptación que la hiciera comprensible para los más pequeños: "Había que buscar un punto que sirviera como eje del argumento, y por eso elegimos el partido de croquet entre Alicia y la Reina de Corazones".
"Es una situación que en el libro original pasa sin pena ni gloria, pero todo el mundo la recuerda. ¿Cómo conseguimos que Alicia y la Reina se conozcan? Porque el Señor Conejo necesita desesperadamente un rival para la Reina, y Alicia es una señorita de buena familia que sabe jugar al croquet", aclara Doctor.
Antes de lucir sus dotes deportivas, Alicia tendrá la oportunidad de conocer a los mágicos habitantes del país de las maravillas, caso de la Oruga Azul, el Sombrerero Loco, la Pequeña Lirona o la Gatita de Cheshire. "Algunos la ayudarán y otros no tanto", reconoce la actriz Noelia Miras, encargada de dar vida a la joven y rebelde Alicia.
"Este personaje es un reto enorme, porque tengo que captar la atención de todo el público, tanto los peques como los mayores. Además, las canciones también exigen mucho", añadió la intérprete.
Veterana de la escena teatral, Margot Martín encarna a la Reina de Corazones, una mujer "autoritaria, mandona, falsa y con muy mala idea. Es un compendio de los peores defectos que puede tener una persona, porque se vale de su dominio y su autoridad para vengarse de todos, y el que no le hace caso pierde la cabeza".
Algunos personajes destacan más que otros, pero "cada uno tiene su muletilla reconocible por todo el mundo. Eso hace que el público ya tenga una cierta empatía con los personajes, pero exige muchísimo a la hora de definirlos sin que pierdan su esencia original", analizó Doctor, que interpreta al Señor Conejo.
Mientras llevaba a cabo la adaptación de la obra, el director se sorprendió con "las trampas que Disney hizo en su película". "La 'Fiesta de no cumpleaños' no pertenece al Sombrerero Loco, sino a Humpty Dumpty, un personaje que aparece en Alicia a través del espejo", desveló entre risas.
